Hitórica disculpa de Alemania por el ‘genocidio de 1904’ en Namibia

2833

El holocausto de los judíos a manos de los nazis tuvo sus prolegómenos. Hace ahora cien años Alemania acabó con los herero en la sabana de Namibia «Dentro de las fronteras alemanas debe ser fusilado cada herero, tenga o no armas, tenga o no ganado», dictó en represalia por la muerte de cien colonos durante una sublevación indígena. La gran mayoría de los 80.000 herero y la mitad de los 20.000 nama fueron ejecutados o perecieron huyendo en el desierto de Omaheke, en lo que los alemanes han aceptado en llamar el primer genocidio del siglo XX.

EL PRIMER ENSAYO DE GENOCIDIO

Fuente: ABC Europa

Por Ramiro Villapadierna

El holocausto de los judíos a manos de los nazis tuvo sus prolegómenos. Hace ahora cien años Alemania acabó con los herero en la sabana de Namibia. «Dentro de las fronteras alemanas debe ser fusilado cada herero, tenga o no armas, tenga o no ganado», dictó en represalia por la muerte de cien colonos durante una sublevación indígena. La gran mayoría de los 80.000 herero y la mitad de los 20.000 nama fueron ejecutados o perecieron huyendo en el desierto de Omaheke, en lo que los alemanes han aceptado en llamar el primer genocidio del siglo XX.

«Nosotros, los alemanes -ha dicho durante la conmemoración en Okakarara (al noroeste de Windhoek) la ministra Heidemarie Wieczorek-Zeul- aceptamos nuestra responsabilidad moral e histórica y la culpabilidad de los alemanes de entonces». «Yo presento mis respetos ante vuestros ancestros masacrados», dijo emocionada la ministra socialdemócrata, dirigiéndose a 5.000 descendientes de los herero que sobrevivieron a la matanza, llegados de todo el país, África del Sur y Botswana y, en inglés, agregó: «En el nombre de Dios os pido vuestro perdón».

En plena boga del racismo cientifista de principios de siglo, cuando las ideologías se arrogaban funciones higienistas y el proyecto de crear hombres nuevos, desangrar pueblos y depurar regiones se iba a convertir en un factor de la política exterior occidental. Si el ministro serbio Garasanin se inspiró en los métodos prusianos para concebir la «limpieza étnica» en el Balcán, el propio Adolf Hitler argumentó años después sus proyectos de exterminio para el pueblo judío y gitano escribiendo que, tras las matanzas de Stalin en la URSS y de las potencias en África, ningún gobierno osaría levantar un dedo «para defender a un judío» de Europa Central.

Prolegómenos

El genocidio turco de los armenios, el exterminio belga en el Congo, las masacres inglesas en el Golfo Pérsico, las depuraciones francesas en África central e Indochina, la gran hambre organizada en Ucrania, la atroz reorganización de Stalin en el sur de Rusia y Asia, la orgía de sangre en Macedonia y el sur de Serbia… eran los prolegómenos de un siglo que iba a parir de seguido el Holocausto, industrializado éste por uno de los pueblos más avanzados de entonces.

«Quien no recuerda el pasado está ciego ante el presente. Alemania ha aprendido amargamente las lecciones de su pasado», proclamó la representante del canciller Schröder, en unas disculpas sin precentes que asumían «atrocidades que hoy llamaríamos genocidio».

En plena sabana africana el Gobierno de la tercera economía del mundo pedía oficialmente perdón a los Herero y los Nama en el centenario de la matanza orquestada por Trotha, el 11 de agosto de 1904.

Aceptar las disculpas

El jefe de los herero se adelantó para aceptar sus excusas, aceptando «el gesto de la ministra alemana, que ha hecho lo que tenía que hacer»; pero Kuaima Riruako agregó que «siempre tendremos el derecho de reclamar justicia al Gobierno alemán», en posible referencia a una demanda a Berlín y empresas alemanas interpuesta por un grupo herero en EE.UU., por valor de 4.000 millones de dólares.

Alemania viene apoyando a Namibia desde su independencia, con un total de 500 millones de euros en ayuda al desarrollo.

El levantamiento indígena contra el dominio alemán se prolongó entre 1904 y 1907 y dejó 65.000 muertos. Durante la Primera Guerra Mundial, Alemania perdió el país a manos inglesas, que lo anexionaron a Suráfrica, de la que se independizó en 1990 tras una larga guerra. Hoy quedan 120.000 herero en Namibia, menos del 7 por ciento de la población actual, y 25.000 blancos de lengua alemana.


HISTÓRICA DISCULPA de ALEMANIA por el ´GENOCIDIO DE 1904´ en NAMIBIA
Fuente: Afrol News, 16 de Agosto

La ministra alemana de Desarrollo, Heidemarie Wieczorek-Zeul, fue mucho más lejos de lo esperado durante la ceremonia de conmemoración de 100 años de la masacre, o «genocidio», por parte de las tropas coloniales alemanas al pueblo herero. Con lágrimas en sus ojos, ofreció la primera disculpa oficial alemana, utilizando también por primera vez el término «genocidio».

«Fue más de lo que los descendientes de las víctimas del primer genocidio alemán habían imaginado, y menos de lo que podían esperar», comenta en su última edición el reconocido semanal alemán «Der Spiegel». La publicación destaca que los historiadores coinciden en que la matanza de casi 80.000 miembros de los pueblos herero y nama, entre 1904 y 1907 se puede solamente denominar como «genocidio» y que el gobierno alemán, hasta ahora, no había reconocido este hecho.

La ministra Wieczorek-Zeul participó este fin de semana en la ceremonia conmemorativa del 100 aniversario oficial de la masacre, llevada a cabo en Okakarara, Namibia. Siendo ella la primera ministra alemana que participaba en la ceremonia, había grandes expectativas con respecto a la terminología que la representante alemana utilizaría en su discurso.

«Los alemanes confesamos nuestra responsabilidad histórica-política y ética-moral y nuestra culpa en aquella época», admitió la ministra. «Les ruego en nombre de nuestro Señor que perdonen nuestros pecados», añadió conteniendo las lágrimas en sus ojos.

En referencia al «genocidio» perpetrado por las tropas imperiales alemanas hace 100 años, Wieczorek-Zeul se refirió a la «locura colonial» que había conducido al racismo, a la violencia y a la discriminación. «Todo lo que he dicho ha sido una apología del gobierno alemán», concluyó la ministra, dando lugar a una fuerte ovación por parte del público.

Ningún representante oficial alemán había tenido hasta este momento el deseo de admitir la culpabilidad y la responsabilidad del genocidio de 1904, ante el miedo a posibles demandas económicas por derechos a remuneración por parte de la comunidad herero. Al no admitir su responsabilidad, Alemania no tenía que temer a ningún paso legal, dado que genocidio tuvo lugar antes de que el derecho internacional criminalizase los crímenes contra la humanidad.

Con una disculpa oficial, Alemania también admite su responsabilidad y las posibles demandas de remuneración, por lo tanto, se hacen más viables. Kuama Riruako, líder tradicional de los herero y que en un primer momento dijo que ahora recaerían exigencias de remuneración contra Alemania, lanzó el domingo un claro mensaje. «Todavía tenemos el derecho de llevar a los alemanes ante la justicia».

Los líderes tradicionales herero y las autoridades alemanas ahora, sin embargo, esperan solucionar el tema fuera de los tribunales. El gobierno alemán ha indicado su voluntad «de destinar ayudas» a la comunidad herero de Namibia, probablemente además de la considerable ayuda para el desarrollo que Berlín canaliza hacia Windhoek.

Heidemarie Wieczorek-Zeul demostró la voluntad alemana de reconocer su responsabilidad y contribuir económicamente mientras se encontraba en Okakarara. Aquí, inauguró un centro cultural financiado por Alemania en Waterberg, donde tuvieron lugar las peores masacres. El centro está dedicado a la historia y a la cultura del pueblo herero.

Muchos miembros del pueblo herero, sin embargo, cuentan con más ayudas del gobierno alemán, que durante las últimas décadas ha pagado enormes remuneraciones al pueblo judío y a otras víctimas del genocidio nazi. Después de todo, se estima que el 85 por ciento de los herero perdieron la vida durante el conflicto que tuvo lugar entre 1904 y 1907. La cultura herero cambió para siempre, perdieron la mayoría de sus tierras y ganados y quedaron económicamente perjudicados.

Mientras que las discusiones morales sobre una posible remuneración económica cobran fuerza en Alemania, éste no es sin embargo el mismo caso en Namibia. Namibia es el principal receptor de la ayuda alemana para el desarrollo en África y el gobierno de Namibia desea que estas ayudas continúen sin que todo ahora vaya a ir preferentemente a un grupo étnico.

Antes de lanzar su histórico discurso en Okakarara, Wieczorek-Zeul se había cerciorado de tranquilizar al presidente Namibia, Sam Nujoma. «Nuestra cooperación significa que nos dedicamos a todos los ciudadanos de Namibia y que por supuesto no habrá ningún pago a grupos especiales», dijo al presidente Nujoma, cuyo partido en el poder, SWAPO, representa al mayoritario pueblo ovambo.

El gobierno alemán espera mantener satisfecho al pueblo herero en el próximo futuro a través de un gran número de gestos de reconciliación. Según Wieczorek-Zeul, se planea crear un «comité alemán-herero para la reconciliación» ya durante la reunión en el próximo mes de noviembre en Bremen, norte de Alemania. Posibles discusiones sobre remuneraciones no están en la agenda de la reunión.