El informe de Pueblos Unidos «Atrapados tras las rejas» fue presentado en la Oficina del Defensor del Pueblo en Madrid. El informe afirma que «Ningún ser humano es ilegal» y por tanto los extranjeros con estancia irregular no pueden ser «encerrados» en los CIE para ser expulsados sin garantías legales, como si hubieran cometido un delito.