El territorio en el que hoy día se encuentra situada Mosul fue cuna de Nínive, la capital del Imperio asirio y una de las ciudades más importantes de la historia del Antiguo Oriente Próximo. Ciudad cristiana desde la antigüedad: Cuando los asirios se convirtieron al cristianismo durante los siglos I y II, la aldea se cristianizó. Mosul tiene construcciones de civilizaciones del año 6000 antes de Cristo. Recordemos que esa zona del Tigris es cuna de las primeras civilizaciones.
Hacia este lugar el profeta Jonás, emprendió el largo viaje (dicen las escrituras), proclamando en su entrada…“Solo cuarenta días más, y Nínive será derribada”. Al final Dios no destruyó la ciudad…»por el arrepentimiento de sus pecados» (Jonás 3:10).
Casualidades de la vida y de la historia, parece que ahora si va a ser derribada por las distintas fuerzas militares que rodean y (ocupan) la ciudad.
Encaramado en una loma del monte Alfaf (los miles, en siriaco) se erige imponente el monasterio de Mar Matta (San Mateo), en la planicie de Nínive (al norte de Mosul). Solo 20 kilómetros de distancia lo separan de las fronteras del ‘Califato’ Islámico. Fundado en el 361 D.C. por el monje ermita San Mateo, es el monasterio siro-ortodoxo más antiguo de Irak. Este extraordinario mirador de la historia, que ha sido espectador de conquistas, guerras y catástrofes como incendios y terremotos, languidece ante la arremetida de los yihadistas.
La abadía estuvo a punto de colapsar cuando las el Estado Islámico tomó las aldeas cristianas de la Planicie de Nínive el fatídico 6 de agosto de 2014. Más de 240.000 cristianos se vieron obligados a huir de sus hogares y buscar refugio en el vecino Kurdistán iraquí. Los monjes, seminaristas y unas sesenta familias cristianas de Mosul que habían acogido los religiosos tuvieron que abandonar el monasterio. “Los ‘peshmergas’ (las fuerzas kurdas) frenaron el avance yihadista a unos pocos kilómetros de aquí”, recuerda fray Yusef Ibrahim, albacea del templo a sus 42 años. Desde entonces, y hasta la ofensiva lanzada este lunes para expulsar al ISIS de la segunda ciudad de Irak, el frente no se había movido: el monasterio estaba a solo cinco kilómetros de la última línea defensiva de los ‘peshmerga’.
“Desde el derrocamiento de Sadam Husein (tras la invasión de las fuerzas estadounidenses en 2003) no ha habido estabilidad en Irak. Las minorías hemos dejado de estar protegidas”, denuncia el hermano Yusef (a El Confidencial ). A su juicio, la persecución de los cristianos en Irak no es solo fruto del fundamentalismo islámico, que alcanzó su auge con el Estado Islámico, sino que también responde a cálculos políticos. El monje habla de proyectos de desintegración de Oriente Medio que se remontan a 1984. “Desde hace más de 30 años, la política de Estados Unidos en Irak ha sido la de dividir el país para debilitarlo con el fin de establecer un nuevo orden regional”, opina. «¿Dónde estaba Occidente cuando masacraron a los cristianos en 2006 en Dora (un suburbio de Bagdad) o en 2008 en Mosul”, exora Yusef, que perdió a su hermano, que era diácono en Mosul, a manos de la insurgencia suní.
En estos días, el Ejército iraquí, apoyado por los ‘peshmerga’ (fuerzas de seguridad kurdas), milicias chiíes, fuerzas iraníes, milicias suníes entrenadas por EEUU y la coalición internacional —incluidas tropas británicas— que lidera Washington, lanza ataques para liberar Mosul, ‘capital’ del ‘Califato’ en Irak y segunda ciudad más importante del país…
Se calcula que en Mosul hay 7000 milicianos del ISIS, que están dispuestos a usar la población civil como parapeto. Muchos civiles intentan huir de la ciudad en medio de varios frentes de batalla. Hay corredores «humanitarios» pero también hay minas antipersona y fuego cruzado.
Otro problema que surgirá de inmediato es evitar las posibles “purgas” de la población chií y sus milicias contra los sunís, mayoría en la ciudad. La ciudad después de la liberación se puede convertir en ingobernable por una espiral de odio.
Millón y medio de personas viven aterrorizadas en Mosul, porque miran su propia historia como país desde el año 2003 (invasión de Irak) y de reojo a la ciudad de Alepo, derruida y destrozada hasta los cimientos.
Redacción Solidaridad.net