Basura electrónica para los empobrecidos

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Cada año, el mundo genera unos 50 millones de toneladas de basura electrónica, la mayor parte va a parar a vertederos de Asia, América Latina y África, a lugares como Agbogbloshie (Accra, Ghana), donde miles de niños acuden a diario para quemarla y obtener cobre y aluminio que vender. Se contamina el suelo y envenena a estos jóvenes.

El barrio de Agbogbloshie, en Accra (Ghana), se ha convertido en un inmenso cementerio de aparatos electrónicos desechados en el Primer Mundo al que acuden a diario miles de jóvenes y niños que buscan algo vendible, como cobre y aluminio. Cada año se generan uno 50 millones de toneladas de basura electrónica (e-waste) en el mundo. Y mucha acaba en los países africanos.

Mike Anane es un periodista ghanés que lleva años denunciando lo que sucede en Agbogbloshie. Entre tanta basura serpentea el río Densu, una nauseabunda y contaminadísima corriente de agua que antes era un vergel. «Recuerdo venir a pescar aquí cuando era niño, había muchos peces», asegura Anane. Ahora el paisaje es desolador.

Teléfonos móviles, ordenadores, impresoras, cables, televisores, radios. De todo se puede encontrar Agbogbloshie, pero nada sirve. Según Anane, unos 3.000 chicos rebuscan entre esta basura cada día y se exponen a peligrosos materiales, como el cadmio o el plomo, que les acaban produciendo cáncer o enfermedades respiratorias. Los chicos queman esta basura para obtener el cobre y el aluminio para vender y acaban inhalando todas las sustancias tóxicas.

Sin embargo, Agbogbloshie no es el único lugar de África donde prolifera esta basura electrónica. Otros países, como Nigeria, también sufren de esta lacra. Lo más curioso es que existe una normativa que impide enviar productos de desecho a terceros países y, en realidad, muchos de estos desperdicios llegan como "donaciones" para países en desarrollo. Pero como dice Anane, "la inmensa mayoría de los aparatos electrónicos que llegan aquí no sirven para nada, van directamente a la basura".

Este problema está directamente relacionado con la obsolescencia programada, una práctica empresarial que se inició en los años veinte del pasado siglo y que consiste en diseñar y construir los objetos de consumo con una vida útil relativamente corta para incentivar aún más el consumo.

Precisamente otro medio británico, el periódico The Telegraph, publicaba recientemente que ordenadores del gobierno del Reino Unido estaban siendo trasladado de forma ilegal a países en vías en desarrollo. La agencia ANSA también denunció en 2009 que a pesar de estar expresamente prohibido por las leyes del Reino Unido, mucha basura electrónica es trasladada ilegalmente desde vertederos de las Islas Británicas hasta África. 940.000 toneladas de basura electrónica británica es lo que llega a África anualmente.

Así, ordenadores de ministerios, departamentos y demás oficinas gubernamentales han sido hallados en montones de basura en África luego de haber sido exportados de forma ilegal. Una vez en su destino, los metales tóxicos que contienen los ordenadores, monitores y demás equipo, sonextraídos por los niños, como ocurre en Agbogbloshie.

Entre los desechos más peligrosos para los jóvenes y niños que queman la basura electrónica destacan:

  1. Plomo en tubos de rayo catódico y soldadura

  2. Arsénico en tubos de rayo catódico más antiguos

  3. Trióxido de antimonio como retardante de fuego

  4. Retardantes de llama polibromados en las cubiertas, cables y tableros de circuitos

  5. Selenio en los tableros de circuitos como rectificador de suministro de energía

  6. Cadmio en tableros de circuitos y semiconductores

  7. Cromo en el acero como anticorrosivo

  8. Cobalto en el acero para estructura y magnetismo

  9. Mercurio en interruptores y cubiertas

* Extracto