La primera palabra que me viene a la mente ante los resultados y las declaraciones tras las elecciones es CINISMO:
Cinismo del PSOE al considerar de forma triunfalista que España le ha respaldado en su proyecto europeísta cuando sólo han votado sí 1 de cada 3 votantes (1 de cada cuatro españoles, que los niños también cuentan). Encima tiene la desfachatez de decir que esperaba menos participación. ¿Cómo se puede convocar un referendum y conformarte con que se molesten en contestar el 40%?. Cinismo también del gobierno por potenciar el voto en blanco como nunca porque ésta vez le convenía.
Cinismo del PP, que desde el principio jugó a decir que si, pero esperar que la abstención y el NO fuesen altos para fastidiar.
Cinismo el de IU, que se apropia de la abstención cuando su campaña por el NO ha sido patética y cobarde. Frente al argumento aplastante del SI «porque nos ha ido y nos irá bien» no se han atrevido a plantear que ésta europa es INSOLIDARIA con los países empobrecidos y que no debemos votar lo que nos conviene sino lo que es justo.
Cinismo de los medios de comunicación, que cuentan los votos NO y blancos para ver «a que partido pertenecen», dando por supuesto que los votantes debemos hacer lo que nos digan nuestros partidos.
Con el referendum se pretendía escenificar, repito; escenificar, la legitimación ciudadana de un texto cocido en los despachos de los grupos de presión de las multinacionales que acutúan en Bruselas y lo que se ha obtendio era…. lo que todos pretendían. Una europa antidemocrática e insolidaria como ésta necesita de dos actitides fundamentales; la Insolidaridad de los ciudadanos que sólo buscan su propio interés, que no se molestan en leer lo que votan o que ni siquiera van a votar y el cinismo de las voces públicas que lo aplauden.
Rodrigo del Pozo Fernández