Cada vez son más las voces que piden el cierre de los CIEs, pero también es necesario no perder la perspectiva de las causas del robo a los empobrecidos.
En estos últimos meses la Unión Europea ha negado el derecho de asilo a miles de personas que se han visto obligadas a salir de sus países como Libia, Túnez, Egipto por la situación de guerra que han vivido y viven, guerras en parte financiadas por estados europeos. Ahora también refugiados sirios buscan asilo y son rechazados en la Unión Europea, huyen en masa a Turquía por temor a represalias del régimen sirio.
Hasta ahora, únicamente 25.000 de las 650.000 personas expulsadas por las guerras del norte de África han llegado a Europa.
Por otra parte ha sido vergonzoso el debate tenido el pasado año en el seno de la UE sobre la modificación de los apéndices legales de la zona Schengen (UE), para no tener que acoger a los refugiados llegados a Italia o Malta de estos países del norte de África.
En Solidaridad.Net y en la revista Autogestión hemos denunciado y seguimos denunciando, la política de la UE contra los empobrecidos: el control militarizado del mar por medio del FRONTEX, la devolución sistemática de los empobrecidos a sus países de origen, el «encarcelamiento en los CIEs» sin las mínimas condiciones de dignidad; todo en el marco del robo a los países africanos y empobrecidos en general, tanto en «robo de cerebros», como de sus materias primas y riquezas naturales.
El Plan África es un ejemplo de lo que estamos diciendo, cuando ya en 2006 se decía desde el Ministerio de Asuntos Exteriores el «reforzar y diversificar los intercambios económicos, así como fomentar las inversiones, sin olvidar la creciente importancia estratégica de la región subsahariana, y en particular el Golfo de Guinea, para nuestra seguridad energética y las oportunidades de negocio en el sector de hidrocarburos para las empresas españolas», toda una perla de colonialismo a la usanza.
Por otra parte los informes que se manejan nos dicen que debido al descenso de la natalidad y el envejecimiento de la población, Europa depende de los inmigrantes para mantener nuestro nivel de protección social, especialmente las pensiones. Tengamos en cuenta que para antes del año 2060 Europa necesita de 52 millones de personas para no bajar su crecimiento económico.
¿Cabe mayor hipocresía en Europa?, creemos que no.
Por todo esto, seguiremos denunciando en la Campaña por la Justicia en las relaciones Norte-Sur las causas de estos mecanismos que quieren hacer de las personas, mercancías; que son las mismas que hacen de un «centro de internamiento» un campo de concentración.
Justicia y Paz ha manifestado en un reciente comunicado su rechazo a la actual situación que se vive en los Centros de Internamiento de Extranjeros, de manera especial los de Aluche (Madrid), Zapadores (Valencia) y Capuchinos (Málaga), donde «se incumplen de manera sistemática los derechos fundamentales de las personas que se encuentran privadas de libertad».
«La Federación se hace eco de las denuncias presentadas por diferentes organizaciones sociales y Defensor del Pueblo, así como por el propio Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de Naciones Unidas que en sus Observaciones Finales del Informe de abril 2011, referente a España, ante las situaciones de abusos, malos tratos, que podrían llegar a ser considerados como torturas y tratos inhumanos y degradantes, según la definición del Artículo 1 de la Convención contra la Tortura de Naciones Unidas.»
Manifiesta así mismo como «el Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de Naciones Unidas ha expresado también su opinión sobre los regímenes de internamiento de extranjeros, como los que se practican en España y considera que la detención de migrantes debería suprimirse.» Para Justicia y Paz «los migrantes en situación irregular no han cometido ningún delito». Justicia y Paz opina que «la penalización de la migración irregular sobrepasa el interés legítimo de todo Estado de proteger su territorio y reglamentar la corriente regular de migrantes »
Agradecemos el informe de Pueblos Unidos sobre el CIE de Aluche en 2011.
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«Inmigración Análisis y rostros»
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