La historia, también la de España, tiene páginas en las que algunos artistas e intelectuales han sabido poner su arte y pensamiento al servicio del bien común. Algunos lo pagaron caro. Sin duda ha existido el artista comprometido…
Pero también su opuesto: El artista servil, que con un barniz de progresismo ñoño y estúpido, ha pretendido dar lecciones de ciudadanía defendiendo a quién le daba de mamar.
No es nuevo el tema, claro que no. Y estos días tenemos un nuevo ejemplo de apoyo «comprometido» en su versión más candorosa, donde el rebaño expresa su babosa admiración por el pastor que cuida su redil.. Por supuesto no niego su derecho a apoyar a un determinado candidato. No nos engañemos. Apenas hay distinción de fondo entre apoyar a ZP o a Mariano Rajoy. Los dos jugarán a llevarse bien con los poderosos. Hacerles la campaña a cualquiera de los dos es definirse a favor del poder.
A lo que me refiero no es a eso. Allá ellos y su conciencia. Está bien que sepamos de parte de quién están y recordárselo cuando sea necesario. Eso no merece un artículo. Pero hay una vuelta de tuerca, cierta perversión, un atrevimiento inusual que sí merece un comentario. Como la campaña de la Plataforma de Apoyo a ZP carece de toda reflexión política y por más que busqué no encontré más argumento que los mismos tópicos del progresismo chato lanzados al viento con inusual torpeza, me toca analizar sus formas, sus eslóganes, signos y símbolos. Y ciertamente, ahí encontramos desnuda el alma de los que suscriben, seguramente sin mucha conciencia, su adhesión incondicional al líder.
Primero, hemos de fijarnos en su elemento distintivo: La ceja. Se trata de convertir un elemento singular de la persona de ZP en símbolo. Ya no es el icono o un gesto que represente un proyecto colectivo. No, es un tema personal. La ceja representa a ZP (a lo mejor debería decir Ceja P, pero no quiero dar ideas). Cuando veo a uno de esos artistas prodigando el culto a la personalidad sin ningún rubor siento un poco de vergüenza ajena. Claro que ver al propio Zapatero marcarse la ceja ya es demasiado y supera lo imaginable en márqueting político. Los cultos a la personalidad no son buenos en política. Si además se refiere a la personalidad de un mediocre moral son peligrosos. Ya tenemos ejemplos en la historia de lo que suponen esas cosas. Confiemos en que un mínimo sentido del pudor desanime imitaciones masivas.
Luego está lo del nombrecito que se han puesto, que también tiene delito. PAZ. Una plataforma de apoyo a quien retira las tropas de Irak a la vez que calla las decenas de guerras que había en ese momento en el mundo, que apoya al presidente que ha aprobado los presupuestos militares más importantes de la historia de este país, que apoya al Sr. que según Amnistía Internacional vende armas a 13 países en conflicto, que apoya al hombre que ha promovido leyes que aumentaron considerablemente las divisiones entre españoles, … Es muy fuerte, un atentado a la inteligencia. Es verdad que vivimos en un mundo en el que un impresentable como Al Gore puede presumir de nobel de la paz pero eso no debería hacernos tratar el tema con tanta superficialidad. La paz es algo muy serio. No insulten a los que trabajan para que sea posible. Hay cosas que son sagradas, señores. No tienen derecho a esas superficialidades.
Luego está esa hermosa canción: Defender la alegría. Cuesta mucho creer que no se refieran simplemente a su alegría por lo del canon. Pero vamos a suponer que se la creen. A quién va dedicada la canción. Vivimos en un país en el que la pobreza aumenta, tanto como la corrupción de nuestros políticos. En ese panorama, ¿qué significa defender la alegría?. La única alegría plena vendrá de la lucha para erradicar las injusticias. Los hambrientos, los parados, los esclavos, la soledad de los viejos, los inocentes que mueren en el vientre de su madre suman millones. ¿Defienden ustedes su derecho a la alegría? Dígannos en que parte del programa del hombre de la ceja pone que hay que luchar para que las multinacionales españolas dejen de robar a los países empobrecidos, que hay que dejar de servir a los poderes económicos. Dígannos la relación entre ZP y la alegría de los últimos de nuestra sociedad.
Es verdad que hacen falta artistas e intelectuales comprometidos, pero eso solo es posible si antes que artistas o intelectuales son personas comprometidas. Si realmente creen en la PAZ, nos gustaría verles a partir de ahora en protestas contra las agresiones a la vida, contra las causas del hambre, contra todas las guerras. Pero adivino que seguiremos sin verles por ahí abajo. Si realmente creen en la alegría, acérquense al dolor y verán cómo detrás de mucho sufrimiento y muerte hay causas políticas en las que el señor ZP está implicado directamente y aún así encontrarán alegría, la alegría de los que comparten sin tener. Si realmente quieren empeñar sus manos en algún gesto procuren que sea para enaltecer a los débiles no para rendir pleitesía a los poderosos.
Apoyen ustedes a quién quieran, pero si hay algo que está claro es que, a estas alturas de la historia, no pueden ir juntos el compromiso y el peloteo a los poderosos. Seamos serios, por favor, que cada día mueren miles de personas por hambre. Un respeto, hombre.