Los soldados de Gadafi fuerzan la expulsión en barcos sobrecargados rumbo a Lampedusa.
La Organización Internacional
para las Migraciones (OIM) ha comunicado este lunes lo que a su vez contaron
varios inmigrantes libios: que vieron la semana pasada cómo se hundía un barco
frente a las costas libias a bordo del cual viajaban entre 500 y 600 personas.
Los testigos, que informaron de los hechos a su llegada a la isla italiana de
Lampedusa (situada a medio camino entre Sicilia y Túnez), declararon que el
buque se hundió entre el jueves y el viernes cerca de Trípoli. «Fue terrible,
había un montón de cadáveres», dijo un testigo citado por la agencia italiana
Ansa.
Lo que no pudieron aclarar las
fuentes fue el posible número de víctimas, ya que aunque algunos cadáveres
llegaron a tierra, otros inmigrantes lograron sobrevivir. Uno de estos
supervivientes fue una mujer somalí que pudo regresar a nado a tierra, aunque en
la tragedia perdió a su bebé de cuatro meses, con el que viajaba. La portavoz de
la OIM, Daria Storia, explicó que la mujer «estaba en estado de conmoción cuando
llegó a Lampedusa», tras subirse a otro barco para huir de Libia. «Estaba
claramente muy desorientada y agitada cuando hablamos con ella», indicó.
Flujo de
refugiados
Desde el inicio de las revueltas
en Libia, donde el régimen de Muamar Gadafi combate desde mediados febrero
contras las fuerzas rebeldes, más de 10.000 personas de varias nacionalidades
han llegado a las islas de Lampedusa y Linosa. Solo durante el pasado fin de
semana, según la OIM, llegaron unas 2.000 personas más.
A
estas llegadas continuas de refugiados se suman también casos de presión de las
fuerzas libias para con los inmigrantes, a algunos de los cuales incluso habrían
obligado subir a un buque disparando al aire. Así lo aseguraron a la OIM parte
de estos «sin papeles» que «por primera vez» señalaron que «fueron forzados»,
según el miembro de la OIM Jean Philippe Chauzy.
Al parecer, algunos refugiados,
que no pueden pagar el pasaje, quedan despojados de todo lo que tienen por los
soldados de Gadafi, incluidos los ahorros y hasta los teléfonos móviles.
Otros comunicaron que no habían tenido que pagar nada. También se sabe que el
viaje ilegal de Túnez a Lampedusa cuesta a muchos tunecinos unos mil doscientos
euros.
La Organización Internacional
para las Migraciones trabaja junto a otras agencias humanitarias para evacuar a
los inmigrantes que permanecen en Libia, y ya ha trasladado a más de 6.000
personas desde Misrata, en el oeste del país, a Bengasi, en la zona oriental.
Al menos otros tres barcos que
abandonaron Libia a finales de marzo han desaparecido. Se teme que cientos de
personas hayan muerto.
Desmentido de
la OTAN
Precisamente este lunes, Bruselas
contradijo versiones de que un helicóptero de la Alianza Atlántica no había
atendido a un buque de refugiados libios, que fueron dejados a su suerte el
pasado 25 de marzo, y que murieron. Serían unas sesenta personas. Bruselas
aseguró que ninguno de sus helicópteros percibió a ningún barco de refugiados a
la deriva.