La intervención del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) arruinó la economía de Zambia, que alguna vez fuera uno de los países más ricos de África subsahariana, afirmó el Movimiento Mundial de Desarrollo (WDM) en un nuevo estudio.
Por Sanjay Suri
LONDRES, 25 may (IPS) – La intervención del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) arruinó la economía de Zambia, que alguna vez fuera uno de los países más ricos de Africa subsahariana, afirmó el Movimiento Mundial de Desarrollo (WDM) en un nuevo estudio.
En la década de 1970, tras la crisis del petróleo y el colapso de los precios de los productos básicos, Zambia debió acudir a ambas instituciones financieras internacionales en busca de créditos.
Las reformas que las dos instituciones le impusieron a cambio ”provocaron directamente la pérdida de decenas de miles de empleos, la destrucción de industrias clave, disturbios sociales y pobreza creciente”, dice el estudio del WDM, una organización no gubernamental con sede en Londres.
El informe, titulado ”Zambia: Condenado a la deuda”, sostiene que ”la liberalización del comercio, la desregulación, el desmantelamiento del sector público y las privatizaciones masivas” son la causa de la caída de Zambia del lugar 130 del Indice de Desarrollo Humano en 1990 (un lugar ya pobre) al 163 en 2001.
La situación se repite en muchos otros países africanos. ”Nuestro estudio de los casos de Malawi y de Senegal nos llevaron a conclusiones muy similares, aunque en diferente grado”, dijo Dave Timms, del WDM, a IPS.
El caso de Zambia, que adoptó un régimen democrático tras su independencia en 1964 y no ha estado en guerra ”es uno de los peores y una de las pruebas más claras del fracaso de las políticas del FMI y el Banco Mundial”, sostuvo Timms.
La intervención del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) arruinó la economía de Zambia.
En algunas áreas, el impacto de las políticas ha sido dramático, sostiene el informe, escrito por los economistas zambianos Jack Jones Zulu y Lishala Situmbeko.
Por ejemplo, la reducción de los aranceles de importación sobre los productos textiles y la eliminación de aranceles a la ropa usada provocó la importación en gran escala de prendas de vestir baratas de segunda mano. Como resultado, de 140 fábricas textiles que existían en 1991 quedaban sólo ocho en 2002, y el número de empleos en el sector cayó de 34.000 a 4.000.
”Solíamos suministrar a los intermediarios 3.500 toneladas de ropas por año, pero ahora sólo les vendemos 500 toneladas”, declaró Ramesh Patel, dueño de una empresa textil. Hace ocho años, la firma tenía 250 empleados, pero ahora sólo tiene 25, contó.
Entre principios de los años 70 y fines de los 80, la deuda externa de Zambia creció de 814 millones de dólares a 6.916 millones, revela el informe del WDM.
Sin embargo, hasta principios del año pasado, Zambia sólo había recibido cinco por ciento de la reducción de la deuda en virtud de la iniciativa para Países Pobres Muy Endeudados (HIPC). Según el WDM, esa iniciativa es ”otro instrumento con el que el FMI y el Banco Mundial ejercen su influencia sobre la economía de Zambia”.
A cambio del alivio de la deuda, las instituciones de Bretton Woods realizan intervenciones políticas en materia de desregulación, privatización, despidos, congelamiento de salarios y reducción del apoyo gubernamental al sector agrícola. Esas políticas han sido hasta ahora ”un rotundo fracaso”.
El propio Banco Mundial reconoció en 2000 que la eliminación de los subsidios al cultivo de maíz y a los fertilizantes provocó ”estancamiento y regresión en lugar de ayudar al sector agrícola de Zambia”.
El producto interno bruto de Zambia por habitante cayó de 1.455 dólares en 1976 a 892 dólares en 2000, señala el informe.
Este declive económico se refleja en una decadencia social. ”Por ejemplo, la proporción de la población considerada desnutrida, con un consumo de calorías inferior a los requierimientos mínimos de energía, aunentó de 45 por ciento en 1990 a 50 por ciento en 2001”, dice el documento.
Sin cambios radicales, parece improbable que Zambia pueda alcanzar la mayoría de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, fijados por los países miembros de la Organización de las Naciones Unidas en 2000, advierte el WDM.
Los Objetivos de Desarrollo del Milenio incluyen la reducción a la mitad de la cantidad de personas que viven con menos de un dólar al día y padecen hambre, el logro de la enseñanza primaria universal y la disminución de la mortalidad materno-infantil antes de 2015.