Según Ziegler las grandes multinacionales se han hecho con el poder mundial a través de un pacto con Kofi Annan, El orden mundial 'asesina' cada día a 100.000 personas hambrientas, pese a tener la capacidad de alimentar a 12.000 millones de seres humanos, el doble de la población mundial, denunció el Relator de la ONU para el Derecho a la Alimentación, Jean Ziegler.
Jean Ziegler es «sociólogo del tercer mundo», abogado, doctor en ciencia política, católico, político y ponente especial de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y de la Alimentación.
Según Jean Ziegler, ponente especial de Naciones Unidas, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, ha negociado un pacto general entre las Naciones Unidas y las principales sociedades capitalistas transcontinentales: el Global Compact. «Los señores del imperio de la vergüenza organizan la escasez de servicios, de los capitales y de los bienes en función del máximo beneficio», dice Ziegler.
Jean Ziegler, ponente especial de Naciones Unidas para los Derechos del Hombre y de la Alimentación, pronosticó hoy una crisis profunda en el seno de la ONU cuando se debata el pago de contribuciones el próximo 31 de julio y pronosticó la desaparición de este organismo internacional que aglutina a 191 países porque existen «muchos problemas de difícil solución».
Ziegler, que asistió ayer a la presentación del II Foro Mundial de las Migraciones, acusó a Estados Unidos de provocar muchos de los problemas que tiene la ONU. En este sentido, señaló que los Estados Unidos se han saltado el derecho internacional, han cometido «torturas», han hecho «desaparecer prisioneros, hacen guerras preventivas y no respetan las decisiones del Consejo de Seguridad», declaró a Europa Press.
En esta misma línea confirmó, que el secretario general de la ONU, Kofi Annan, ha tenido que ceder algunas veces al chantaje o «negociar» tanto con los Estados Unidos como con las grandes multinacionales que dominan el mundo.
En este sentido, recordó que el secretario general de la ONU, consciente de que no se puede obligar a los cosmócratas a respetar la Carta de Naciones Unidas, decidió llegar a un acuerdo y elaboró el Global Compact, un pacto general entre las Naciones Unidas y las principales sociedades capitalistas transcontinentales.
Para confirmar este «declive» de la ONU alega que, de las 43 guerras de 'baja intensidad' que han asolado el planeta entre 1993 y el 2003, la ONU no ha podido impedir ninguna. Además, el 18 de septiembre de 2004, el presidente de los Estados Unidos firmó una orden presidencial que permitía la creación de comandos que operaran al margen de las leyes nacionales o internacionales. Para intentar silenciar todos estos «crímenes», Ziegler señala que Washington financia el 26 por ciento del presupuesto ordinario del funcionamiento de la ONU y contribuye en un 60 por ciento al Programa Mundial de Alimentos.
EL IMPERIO DE LA VERGÜENZA
En su libro 'El Imperio de la Vergüenza', que la editorial Taurus acaba de publicar en España, este representante de la ONU describe todo estos problemas con esta organización mundial y denuncia diversos aspectos relacionados con las nuevas prácticas feudalistas que dirigen las 500 multinacionales más poderosas del mundo. Estas críticas han provocado que Ziegler reciba numerosas amenazas y chantajes de las que prefiere no hablar.
Para explicar esta vuelta al feudalismo, Ziegler pone como ejemplo a las empresas farmacéuticas que adaptan sus precios a la situación económica del lugar. «Los señores del imperio de la vergüenza organizan la escasez de servicios, de los capitales y de los bienes en función del máximo beneficio», asegura. Esta escasez organizada destruye cada año la vida de millones de hombres y mujeres sobre la tierra. Así mas de 10 millones de niños de menos de 5 años mueren cada año por desnutrición , epidemias, contaminación de las aguas e insalubridad.
Ejemplo del poder de las farmacéuticas es que de los 1.390 nuevos medicamentos a los que se les ha permitido su comercialización, sólo 16 estaban destinados a combatir algunas de las enfermedades «olvidadas» que afectan al tercer mundo. «Las farmacéuticas prefieren invertir en medicamentos que se puedan pagar a precio de oro en los países desarrollados que ofrecer medicamentos baratos para las familias del tercer mundo».
Paz Digital, 23-06-2006
LA TRAGEDIA DEL HAMBRE ESPOLEA LAS MIGRACIONES
Madrid, 25 jun (EFE).- El relator especial de la ONU sobre el derecho a la Alimentación, el suizo Jean Ziegler, aseguró hoy que el hambre, la desesperación y la angustia de no saber qué pasará mañana siguen siendo las principales causas de las migraciones desde los países del Tercer Mundo hacia las naciones desarrolladas. Ziegler, autor del libro «El Imperio de la Vergüenza», ha asistido al II Foro Social Mundial de las Migraciones, celebrado en Rivas Vaciamadrid, en la periferia de la capital española, que concluyó ayer con la reclamación de una «ciudadanía universal» y del derecho de cualquier persona a establecerse donde desee.
Durante su estancia en Madrid, Ziegler aseguró, en una entrevista con Efe, que los inmigrantes africanos no dejarán de intentar llegar a España, una de las principales puertas de entrada en Europa, pese al peligro que conllevan las rutas cada vez más largas que se les imponen, porque es la única esperanza de sortear la pobreza y el hambre, que afecta en el mundo a más de 800 millones de personas.
Los datos que manejan los organismos internacionales muestran una «horrible tragedia», subrayó el relator de la ONU al señalar que el 36 por ciento de la población de Africa está «mal alimentada».
Ziegler recordó que 100.000 personas mueren cada día como consecuencia directa o indirecta del hambre, que cada cinco segundos fallece por esta razón un niño de menos de diez y que cada cuatro minutos una persona pierde la vista por falta de vitamina A.
«Todo esto no es una fatalidad -añadió-, sino consecuencia del orden capitalista mundial, asesino y absurdo, porque mata sin necesidad, ya que cuando un niño muere de hambre, muere asesinado».
Respecto al papel de la ONU ante este desolador escenario, Ziegler dijo que esta organización «está en crisis profunda», porque Estados Unidos, que es su mayor contribuyente, practica una política «de tortura, de secuestro y de violaciones de los derechos humanos» y tiene un «gran poder de chantaje».
Jean Ziegler calificó de «mercenarios» al Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Organización Mundial del Comercio (OMC), porque practican, dijo, una política de «liberalización extrema y de privatización», lo que significa que los poderes estatales en el Tercer Mundo desaparecen, lo que provoca una desprotección de sus habitantes.
La globalización, remarcó, produce grandes riquezas, pero al mismo tiempo aumenta la pobreza «como nunca lo había hecho antes», por lo que instó a que sean los estados de origen de las multinacionales los que impongan el respeto a las leyes laborales de los trabajadores del Tercer Mundo.
La deuda externa es la soga que asfixia a los países en vías de desarrollo. Todos sus ingresos se van en los intereses de la deuda y no se puede invertir en educación, salud, etcétera. Depende, en parte, de la opinión pública. No somos impotentes ante el orden internacional: en democracia lo podemos todo si nos organizamos.