La cara oculta de Walt Disney

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Imputaciones de esclavitud infantil, explotación y abusos en empresas proveedoras. Hasta 2002 en Bangladesh las trabajadoras debían coser camisetas de Disney en jornadas de 14 a 15 horas y eran golpeadas con frecuencia por los supervisores. Cobraban 5 centavos de dólar por camiseta, que la multinacional vendía luego por 18 dólares. A comienzos de 2001, salió un informe sobre las plantas chinas que fabrican los productos de la Walt Disney Company: hasta 18 horas de trabajo por día, los siete días de la semana, durante meses de forma ininterrumpida. Según el informe, las trabajadoras, algunas menores, recibían un sueldo de entre 38 y 63 euros mensuales.

PRODUCTOS, MARCAS

Revistas de historietas, libros, películas, juguetes y ropa con los pejes del ratón Mickey, el pato Donald, Goofy, Bambi, Cenicienta, Peter Pan, Pocahontas, Winnie Pooh y Tarzán. Estudios cinematográficos como Miramax. Parques de diversiones y centros turísticos como Disneylandia en París y Los Ángeles

DATOS DE LA EMPRESA

Ventas (2002): 21.790 millones de euros
Beneficios (2002): 2.430 millones de euros
Plantilla: 115.000 trabajadores
Sede: Burbank (California, Estados Unidos)

IMPUTACIONES

Esclavitud infantil, explotación y abusos en empresas proveedoras.

Todos conocemos a los famosos personajes de Disney, que nos han acompañado a lo largo de nuestra infancia. El ratón Mickey, creación del genial dibujante Walt Disney, hizo su aparición en 1928; el pato Donald, en 1934. En la actualidad, la Walt Disney Company es una gigantesca «multinacional de la creatividad», con parques de entretenimiento como Disneylandia, los estudios cinematográficos Miramax y la cadena televisiva ABC News. Es una pena que esta compañía, que ha alegrado tanto nuestra vida, también tenga un lado oscuro. Algunos muñecos de plástico de Disney se fabrican en Asia, en condiciones tales que uno desearía que solo fuera parte de una película de Disney y que pronto llegara el final feliz. Lamentablemente la realidad es otra.

Una investigación estatal en Canadá descubrió en el año 2001 una situación espantosa en la empresa proveedora de Disney KTBAInc. De Laguna Hills (California): unos 800 trabajadores fabricaban allí diademas y varitas mágicas por un salario medio de 1,35 dólares la hora. El salario mínimo fijado en California es de 6,25 dólares. En la fábrica trabajaban niños entre 7 y 15 años. La Walt Disney Company alegó que no era responsable, pero a mediados de diciembre de 2001 se declaró dispuesta a pagar 903.000 dólares de indemnización a los trabajadores.(1)

Durante varios años, hasta el otoño de 2002, en una empresa proveedora de Walt Disney en Bangladesh se dio la siguiente situación: las trabajadoras debían coser camisetas de Disney en jornadas de 14 a 15 horas y eran golpeadas con frecuencia por los supervisores. Recibían como retribución 5 centavos de dólar por camiseta, que la multinacional vendía luego por 17,99 dólares (lo que supone un porcentaje de 0,25 % por camiseta). Cuando organizaciones internacionales como el estadounidense National Labour Committee empezaron a hacer público este estado de cosas, Walt Disney suspendió todos los encargos a las empresas proveedoras. La presión pública condujo a que los propietarios de la empresa mejoraran de repente las condiciones de trabajo.

En otoño de 2002, a consecuencia de una investigación de la Intemational Transport Workers Association, se conocieron las condiciones en que debían trabajar los empleados de cruceros de lujo de Walt Disney, como, por ejemplo, Disney Magic: los empleados tenían unos horarios de trabajo extremadamente largos -hasta 16 horas diarias siete días a la semana- y además estaban mal pagados.(2)

A comienzos de 2001, un grupo de consumidores críticos de Hong Kong publicó un informe sobre los terribles abusos registrados en las plantas chinas que fabrican los productos de la Walt Disney Company (véanse pp. 190-191): hasta 18 horas de trabajo por día, los siete días de la semana, durante meses y meses de forma ininterrumpida. Según los datos del informe, la mayoría de las trabajadoras, algunas de no más de dieciséis años, recibían un sueldo de entre 38 y 63 euros mensuales. Este monto se encuentra por debajo del salario mínimo dispuesto en la ley.

En el año 2000 habían salido a la luz irregularidades similares ocurridas en otras cuatro plantas que proveen a Disney desde China. ¿Cómo reaccionó la «fábrica de sueños»?: suspendió de inmediato los pedidos en tres de las cuatro fábricas. Las obreras se quedaron sin trabajo y así resultaron doblemente perjudicadas.

También se conocieron casos parecidos en fábricas de la isla de Macao, que proveen a la compañía Disney (véase p. 192).

En octubre de 1998, los trabajadores de una planta proveedora de Disney en Haití intentaron organizarse sindicalmente y fueron amenazados por sus superiores. Al menos despidieron a siete operarios por su presunta actividad sindical (véase p. 192).

LOBBYS INDUSTRIALES A LOS QUE PERTENECE DISNEY

USCIB, GBDe, ACC

NOTAS:

(1) Informe de New York Time 15/12/2001
(2) The Guardian

Fuentes: Tomado del libro Negro de las Marcas. El lado oscuros de la empresas globales. Klaus Werner y Hans Weiss