China va a gastarse nada menos que 50.000 millones de dólares en equipos de fabricación de circuitos integrados durante 2024. Durante los siete primeros meses de este año ha invertido en este tipo de máquinas casi 26.000 millones de dólares. Son unas cifras de auténtico récord. De hecho, el gasto conjunto en equipos de producción de semiconductores que han realizado EEUU, Taiwán y Corea del Sur en 2024 no iguala las cifras de China.
Por detrás 5 años
China tiene un gran problema. Gerald Yin Zhiyao, el presidente y director general de AMEC (Advanced Micro-Fabrication Equipment China), sostiene que los equipos de fabricación de chips de origen chino actualmente están entre 5 y 10 años por detrás de sus competidores más aventajados en términos de calidad y fiabilidad.
AMEC es una de las mayores compañías chinas especializadas en el diseño y la producción de los equipos involucrados en la fabricación de circuitos integrados. No obstante, Yin Zhiyao no es el único experto que se ha mojado y ha cuantificado el desfase de China en este ámbito. ITIF (Information Technology and Innovation Foundation), un laboratorio de ideas estadounidense sin ánimo de lucro especializado en el estudio de la industria y la tecnología, defiende que los fabricantes chinos de chips más competitivos van cinco años por detrás de los líderes globales en producción de circuitos integrados si nos ceñimos a su capacidad tecnológica.
Sea como sea la gran cantidad de dinero que China está invirtiendo específicamente en equipos de fabricación de circuitos integrados refleja que su producción interna no puede cubrir su demanda actual. Y, además, respalda lo que defienden expertos como Yin Zhiyao o los técnicos de ITIF: actualmente el desarrollo tecnológico de los fabricantes chinos de equipos de producción de semiconductores es inferior al de sus competidores extranjeros más avanzados, lo que obliga a los fabricantes chinos de chips a ir a buscar fuera algunas de las máquinas que necesitan para sostener su competitividad.
En cualquier caso, las máquinas de producción de circuitos integrados que están llegando a China procedentes del extranjero no son equipos de litografía de ultravioleta extremo (UVE) ni de ultravioleta profundo (UVP), que son los más avanzados. El envío a China de estas dos clases de máquinas está expresamente prohibido por las sanciones de EEUU y sus aliados. Sin embargo, hay muchos otros tipos de equipos que también intervienen en la fabricación de circuitos integrados y que no están prohibidos, así como máquinas de litografía más antiguas que por el momento pueden seguir llegando a China.