“Ayudar a encontrar una vía que consolide la paz, una paz sólida y completa, este es el propósito de nuestra participación en los diálogos”, ha dicho Su Exc. Mons. Juan Carlos Barreto, obispo de la diócesis de Quibdo y miembro de la Comisión de la iglesia católica para el diálogo entre el gobierno colombiano y los grupos de guerrilla ELN (Ejercito de Liberación Nacional)
Lo ha declarado Mons. Barreto al final de la reunión celebrada en Bogotá, entre los operadores de reconciliación y paz promovidos por la Comisión para la Reconciliación Nacional, a la que pertenecen los obispos de la diócesis cuyo territorio se encuentra en zonas de conflicto. “Colombia busca la paz para poder dar a las comunidades de la zona una nueva perspectiva, una esperanza de paz y para construir un mundo diferente al que han vivido durante años”, ha reiterado Monseñor Barreto.
La Comisión está compuesta por una delegación de las Naciones Unidas, por los 20 obispos de la diócesis involucrada, así como por los generales del ejército y de la policía, miembros del gobierno y guerrilleros
Este 1 de octubre a media noche ha comenzado el alto el fuego bilateral entre el Gobierno colombiano y el ELN concordado hace tres meses, y que durará hasta el 9 de enero, pero con la perspectiva de prorrogarlo en base a la evaluación de la Comisión para el control y la prevención. La Comisión está compuesta por una delegación de las Naciones Unidas, por los 20 obispos de la diócesis involucrada, así como por los generales del ejército y de la policía, miembros del gobierno y guerrilleros. La vigilancia sobre el respeto del cese del fuego se realizará en los 33 municipios donde está presente el ELN.
La noticia es crucial para todos aquellos sectores sociales que quieren la paz con profundas reformas democráticas. Además, las negociaciones con ELN en Quito podrían ser más rápidas que las de La Habana, dada la experiencia adquirida en el proceso con las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia). Por lo que ya existe un terreno explorado que permite al ELN asumir muchos de los compromisos acordados con las FARC.
La Iglesia Católica, protagonista en la mesa de diálogo, tiene una organización bien estructurada a nivel local. Según el Mons. Barreto, en cada una de las 20 diócesis involucradas, los obispos pueden formar una comisión con personas preparadas para esta tarea. Hay tres niveles de verificación, ha explicado: uno a nivel nacional, presidido por el Presidente de la Conferencia Episcopal, el segundo a nivel regional y el tercero en cada diócesis.
Fuente: Agencia Fides