La economía española mantiene desde hace varios años una fuerte creación de empleo, (…) no se pone en duda el vigor del empleo pero de lo que no se habla tanto es de las condiciones laborales de los nuevos trabajadores que llegan al mercado laboral.
El sueldo medio se situó en 16.018 euros anuales en 2005 y los nuevos ocupados cobran menos de 1.000 euros al mes. Cinco millones de asalariados cobran entre 9.000 y 12.600 euros al año
La economía española mantiene desde hace varios años una fuerte creación de empleo, que aumenta anualmente incluso por encima de lo que avanza el Producto Interior Bruto (PIB). El pasado año no fue una excepción y se registraron un millón de nuevos asalariados, la mitad de ellos inmigrantes provenientes del proceso extraordinario de regularización.
Así, no se pone en duda el vigor del empleo pero de lo que no se habla tanto es de las condiciones laborales de los nuevos trabajadores que llegan al mercado laboral. La estadística de la Agencia Tributaria, Mercado de trabajo y pensiones en las fuentes tributarias, conocida el viernes, arroja algo de luz sobre este asunto.
Según estas cifras -que reflejan fielmente la realidad, ya que su fuente son las declaraciones de la renta de empresas, trabajadores y Administraciones- más de la mitad de los nuevos asalariados de 2005 recibieron retribuciones inferiores al salario mínimo interprofesional (SMI), fijado para ese año en 7.182 euros brutos al año (513 euros mensuales).
Así, de los 1.039.106 nuevos asalariados registrados por la Agencia Tributaria el pasado año, 380.857 cobraron incluso menos de la mitad del SMI y 257.501, una cantidad inferior al citado salario mínimo.
Es más, según reconoce la propia Agencia Tributaria ‘prácticamente el total de las personas que se incorporaron al mercado laboral en 2005, cobran menos de dos veces el SMI’. Estaríamos hablando, por tanto, de salarios, todos ellos, por debajo de 1.026 euros al mes.
Además, no sólo el nuevo empleo se concentra en estos salarios más bajos, sino que en los tramos retributivos más altos se registraron recortes del número de trabajadores. De hecho, en el tramo de los que cobran entre 32.310 euros y 53.865 euros anuales se produjo un descenso de 109.031 trabajadores.
Toda esta situación se explica, en parte, porque más de la mitad de los nuevos puestos de trabajo se ubican en sectores con empleos poco productivos y, por tanto, con retribuciones más bajas. Es el caso de la construcción y los servicios inmobiliarios, que absorbieron casi un tercio del nuevo empleo; el comercio y los servicios de empresa generaron otro tercio y la industria, cuyo empleo es más cualificado, sólo creó el 0,2% de los nuevos puestos de trabajo.
Esta estadística, muestra también que el salario medio de los 18,3 millones de asalariados el pasado año fue de 16.018 euros anuales.
La diferencia entre el salario medio y el de los trabajadores que llegan nuevos al mercado laboral es habitual y la Seguridad Social lo ha llegado a cifrar en el entorno del 30% inferior. En el caso de esta estadística los nuevos salarios son sólo un 11% más bajos que el de la media.
Los hombres ganan mucho más
La brecha entre los salarios que perciben los hombres y las mujeres es, según la Agencia Tributaria, de casi 6.000 euros anuales, a favor de los trabajadores masculinos. En concreto, el salario medio de los varones ascendió a 18.321 euros anuales, mientras que ellas cobraron una media de 12.800 euros al año.
Hay que precisar que esta diferencia se obtiene de las retribuciones globales y, por tanto, no puede decirse que la mujer cobre un 43% menos que los hombres por el mismo trabajo, ya que la comparación no se hace entre hombres y mujeres en el mismo puesto. Si bien, la diferencia en las retribuciones globales entre hombres y mujeres tiene su principal explicación en que las mujeres ocupan empleos peor retribuidos que los hombres.
De entre todos los asalariados, el mayor colectivo es el de los que cobran entre 9.000 y 12.605 euros al año, formado por cinco millones de trabajadores; a este grupo le siguen los que cobran menos de la mitad del salario mínimo, 3,2 millones de trabajadores, que en su mayoría tienen empleos a tiempo parcial o trabajos esporádicos de pocos días. En otro extremo, hay 186.631 trabajadores que cobran más de 71.820 euros al año, lo que equivaldría a 5.130 euros al mes.
Según las cifras oficiales de la Agencia Tributaria, los salarios crecieron un 2,3% en 2005 respecto al año anterior. Esto supondría que los asalariados habrían perdido 1,4 puntos de poder adquisitivo. Pero si sólo se tienen en cuenta los diez millones de trabajadores con convenio colectivo, éstos registraron un incremento salarial medio del 4%, por el impacto de las cláusulas de garantía salarial.
Planes del Gobierno contra la exclusión social
El Consejo de Ministros aprobó el viernes sendas iniciativas para luchar contra la exclusión social y la pobreza. La primera de ellas consiste en una ‘estrategia nacional para la inclusión social’ que se aplicará entre 2006 y 2008 y que movilizará 56.596 millones de euros, distribuidos entre todas las administraciones y organizaciones sociales, especialmente ONG. El objetivo de este plan es ‘adecuar el crecimiento económico al bienestar social’, según anunció la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega. Dentro de esta estrategia el Ejecutivo incluye la subida del salario mínimo hasta 600 euros mensuales al final de la legislatura y el incremento del 26% de las pensiones mínimas, ambos compromisos electorales.
También forman parte del plan las medidas para reducir el abandono escolar prematuro al 20% en 2008 y la intención de aumentar la tasa de empleo al 66% en 2010, reducir el paro juvenil hasta el 18,6%, como exige la Estrategia europea de Lisboa.
El Ejecutivo también dio el visto bueno a un informe sobre la lucha contra la pobreza que recoge el esfuerzo presupuestarios para destinar el 0,5% del PIB a la ayuda al desarrollo en 2008 y el 0,7% en 2012. Asimismo el Gobierno ha enviado a Bruselas la ejecución del primer año de Plan Nacional de Reformas, tras haber puesto en marcha 164 medidas. España ya ha alcanzado el 98,8% de la renta per cápita de la UE.
Raquel Pascual / MADRID (14-10-2006)
Cinco Dias