Que se aclaren; o están con la vida del no nacido o están con un partido abortista como el PP que, a base de subvencionar con sus leyes autonómicas las iniciativas de la red Madre, se tapa la cara y continua siendo pro-abortista
En las últimas semanas los medios aparentemente pro-vida no cesan de alabar al gobierno valenciano y a su presidente por las iniciativas legales en las que se propone proteger a las madres. Valiente hipocresía tratándose de la comunidad que desde su Instituto de Infertilidad es pionera en la selección pre-implantatoria; una práctica eugenésica y contra la vida, similar a la producción de bebes-medicamento que tanto les escandaliza cundo se hacen en la Andalucía gobernada por el PSOE.
Que se aclaren; o están con la vida del no nacido o están con un partido abortista como el PP que, a base de subvencionar con sus leyes autonómicas las iniciativas de la red Madre, se tapa la cara y continua siendo pro-abortista.
Hace décadas que la Doctrina Social de la Iglesia dejó claro que no es de recibo que ponga un comedor el mismo empresario que causa el hambre pagando salarios de miseria. No lo es tampoco que se lave la cara política de un partido que ha fomentado el aborto y la investigación con embriones, a base de propuestas de ley asistenciales.
Que se aclaren estos supuestos pro-vida si de verdad quieren una política a favor de la vida, y la defiendan entonces en el campo de la investigación, de la vivienda, de las relaciones laborales,… tantos modos como hoy se aplasta e instrumentaliza vida del no nacido. Porque a lo que se ve, juegan a favorecer la propaganda de un partido que ha puesto en las elecciones europeas un candidato con olor a sacristía y que recientemente dejó votar a favor del aborto a la mitad de sus europarlamentarios. Todo un ejemplo de lo que denunciamos aquí.