Aunque monseñor Fernando Sebastián valoró el "alto el fuego" de ETA como un "alivio para todos" añadió que detrás de este anuncio hay muchos interrogantes porque "no sabemos cuánto va a durar y qué va a haber después".
Monseñor Fernando Sebastián, arzobispo de Pamplona, hizo una breve referencia al «mal llamado» -según el prelado- proceso de paz, iniciado por el Gobierno tras el comunicado de la banda terrorista ETA, en la que anunciaba un «alto el fuego permanente».
Para monseñor Sebastián no se puede hablar de proceso de paz propiamente dicho porque «no hay guerra entre dos bandos, sino una organización terroristas que mata por la espalda»; por este motivo prefirió hablar de «final del terrorismo».
Tras esta puntualización, el arzobispo afirmó que «la labor más importante de la Iglesia» (que está haciendo y hace) para contribuir a la paz, es intensificar la educación moral de los jóvenes y la sociedad en general, inculcando por todos los medios el «no matarás», y el amor al prójimo y a los enemigos».
El arzobispo de Pamplona respondió a los periodistas sobre esta cuestión en la sede de la Conferencia Episcopal Española (CEE), durante la rueda de prensa convocada para presentar el Encuentro nacional de Jóvenes que se celebrará en Pamplona y Javier el próximo mes de agosto.
Monseñor Sebastián considera fundamental «que se reconozca el valor de la Iglesia en su propio terreno y no por lo que pueda hacer eventualmente» si se la llamara a una mediación, aunque confesó que «no creo que nos pidan mediación a los obispos»; aunque no negó que algún eclesiástico pudiera realizarla si se le pidiera, porque «cualquier persona honesta que ame la paz y la justicia» estaría dispuesta.
Aunque monseñor Fernando Sebastián valoró el «alto el fuego» de ETA como un «alivio para todos» añadió que detrás de este anuncio hay muchos interrogantes porque «no sabemos cuánto va a durar y qué va a haber después».