El pasado 27 de abril, obispos españoles hacían declaraciones sobre la desobediencia civil.El cardenal arzobispo emérito de Barcelona, Ricard Maria Carles, dijo ayer en una entrevista a TV3: «Obedecer antes la ley que la conciencia lleva a Auschwitz», en referencia a la obligatoriedad de los funcionarios de celebrar bodas homosexuales.
Carles añadió: «Porque no eran delincuentes los que hicieron Auschwitz, sino gente a la que se forzó o que creyó que tenía que obedecer primero las leyes del Gobierno nazi que a su conciencia». Carles reconoció que «los alcaldes tienen una situación privilegiada, no están obligados y pueden delegar, pero los funcionarios, los jueces, no pueden delegar».
El obispo de Segorbe-Castellón, Juan Antonio Reig Pla, instó ayer a la «desobediencia civil» a los alcaldes que no quieran casar a homosexuales. Reig Pla, en sintonía con la petición que hizo el pasado viernes Alfonso López Portillo, presidente del Pontificio Consejo para la Familia, aseguró que el Gobierno «va a reconocer derechos nunca promulgados que son puramente subjetivos», en referencia a esos matrimonios.
Apuntó que «si a cualquier alcalde le obligan a sacrificar su conciencia y a ejecutar los actos por los que debe ir contra su conciencia rectamente formada, tiene que llegar a la desobediencia civil».