La nueva ley de libertad religiosa limitará la objeción de conciencia según el Ministro de Justicia
La libertad de conciencia no puede ser una excusa permanente para desobedecer la ley. Esto ha declarado el Ministro de Justicia, Francisco Caamaño, durante la apertura del curso La pluralidad religiosa en la sociedad española contemporánea. Cuestiones a debate, que organiza la Fundación Pluralismo y Convivencia en El Escorial, en el marco del debate sobre la nueva Ley Orgánica de Libertad Religiosa, de la que únicamente se conocen determinados rasgos, pero nada concreto.
A la vista de una declaración de tanta trascendencia, hecha por parte de uno de los responsables de la futura ley, Marcial Cuquerella, presidente del OLRC ha dicho:
1. En primer lugar, exigimos al Ministro de Justicia que especifique cuáles son esos casos en los que la libertad de conciencia no es «excusa». Si hablamos de objeción médica o farmacéutica o de los padres en lo tocante a la educación de los hijos. En cualquier caso, no especificar supone echar gasolina al fuego de la incertidumbre ciudadana, muy preocupada por la nueva ley.
2. En segundo lugar, constituye una irresponsabilidad por parte del señor Caamaño el transmitir a la ciudadanía que la conciencia es una excusa. La conciencia es la exigencia más íntima y personal sobre los límites a los que una persona puede someter sus actos, y nadie puede obligar a un semejante a obrar contra su propia conciencia.
Por último, Cuquerella ha instado al Ministro de Justicia a obrar, trabajar y legislar a favor de la libertad de los ciudadanos, y le ha animado a que no tenga miedo de las consecuencias que el libre ejercicio de esta libertad pueda traer.