Para el PSOE hoy, gracias al laicismo han florecido las libertades en nuestro país. Quizá han florecido las libertades en minúsculas, porque la LIBERTAD desde luego no. Se lo pueden preguntar a los inmigrantes asesinados en las vallas de Ceuta y Melilla (sin que el gobierno del PSOE moviera un dedo).
El PSOE ha hecho público un manifiesto con ese título con motivo del día de la Constitución. Afirma que hoy en España hay fundamentalismos religiosos. Y tiene razón. Los beatos del laicismo, bien pertrechados por sus medios de comunicación y desde sus cargos abundantemente remunerados, atacan a todo lo que se sale de su órbita y «perdonan la vida» de los cristianos dejándonos existir, ya que ellos respetan «todas las opciones que suscita la vida personal y social». Siempre que no pretendan influir en la vida pública.
Para ilustrar la contribución de los cristianos a la política española veamos aquí la experiencia de Jesús Quijano. Fue secretario regional del PSOE de Castilla y León durante varios años y candidato a la presidencia de la Junta. En un artículo titulado «Aportación cristiana a la transición política en Valladolid: un recuerdo personal», Quijano afirma «En muchos casos, la inclinación progresiva hacia la actividad política estuvo precedida, o acompañada, por una vivencia comprometida de la fe cristiana y por una forma determinada de entender el componente social de tal creencia religiosa. Éste fue también mi caso, a lo largo de un proceso bastante similar al que pude percibir en muchas otras personas. (…refiriéndose a la Iglesia)…allí fue donde encontramos un espacio adecuado que reunía casi todas las condiciones requeridas. (…) En aquel ambiente surgió el compromiso político concreto con una naturalidad incontestable. Fuimos bastantes los que optamos por el Partido Socialista Obrero Español hasta el punto de que buena parte de quienes luego hemos tenido alguna notoriedad política reconocemos aquella procedencia común. (…) Si hubiera de explicar cuál fue la razón de aquella opción política, y no de otras (…) podrían fácilmente encontrarse motivos comunes relacionados con nuestra trayectoria cristiana». Trayectoria que quedó abandonada por el cargo y el sueldo, como en muchos otros casos.
Pero para el PSOE hoy, gracias al laicismo han florecido las libertades en nuestro país. Quizá han florecido las libertades en minúsculas, porque la LIBERTAD desde luego no. Se lo pueden preguntar a los inmigrantes asesinados en las vallas de Ceuta y Melilla (sin que el gobierno del PSOE moviera un dedo). O a las familias hipotecadas hasta las cejas para comprar una vivienda (mientras la Caixa condona créditos millonarios al PSOE). O a la mitad de los nuevos contratados el año 2005 que cobraban menos de la mitad del Salario Mínimo Interprofesional (mientras los eurodiputados españoles cobran 9.000 euros mensuales de salario base, más dietas…). O a las mujeres prostituidas, en su mayoría inmigrantes (y los progres pidiendo la legalización de la esclavitud). O a los jóvenes enganchados a las drogas en el país de mayor consumo de Europa (y los ayuntamientos legislando dónde se deben emborrachar los jóvenes para no molestar a los vecinos).
Dicen los del PSOE que el laicismo promueve la igualdad. A ver si a ellos les mueva a igualar su sueldo de diputados con el salario mínimo interprofesional que hoy cobran un millón de trabajadores. Sus pensiones con las de los jubilados españoles. Su jornada laboral (tres días a la semana) con las inmigrantes del servicio doméstico (una tarde libre a la semana). Mientras tanto sus discursos no son más que defensa de sus privilegios.