Varios centenares de madrileños convocó el Movimiento Cultural Cristiano en las marchas contra las causas del hambre. Se celebraron en 3 ciudades: Madrid, Getafe y Alcalá de Henares… Recogemos el texto completo leído durante la concentración: ´Hermano, pueblo mío: yo te escribo desde todos los frentes. Te escribo desde todas las guerras. Te escribo en la trinchera en donde todos los débiles y los oprimidos de la Tierra tratan de defenderse de los fuertes y poderosos´…´Tienes que saber, pueblo mío, que EL PROBLEMA POLÍTICO MÁS IMPORTANTE ES EL HAMBRE´…El hambre no dejará de existir mientras no deje de ser un negocio consentido políticamente. El hambre no dejará de existir mientras no deje de ser un negocio consentido políticamente´…
CONCENTRACIÓN DE LAS MARCHAS DE MADRID. DICIEMBRE 2003
ACTO PRIMERO: CARTA A TODOS LOS ASISTENTES
TE ESCRIBO, PUEBLO MIO, HERMANO…
Te escribo, pueblo mío, hermano, porque estoy lleno de preguntas y dudas. Porque quiero gritarlas o al menos susurrarlas. Te escribo ensordecido por el ruido de este reclamo impertinente del consumismo que nos promete felicidad y nos está haciendo unos infelices. Te escribo cegado por tantas luces de bombillones artificiosos que nos impiden ver la luz. Te escribo en medio de esta aglomeración que llamamos ciudad. Una ciudad insomne en donde unos no duermen por la necesidad de atrapar las cosas que no tienen y en donde otros no duermen por el miedo a perder las cosas que creen tener, porque en realidad son las cosas las que les tienen a ellos.
Te escribo atiborrado de esta cultura del consumo y de la muerte que, INSTALADA EN MEDIO DE ESTA MISERIA TAN ABOMINABLE EN LA QUE VIVEN EL 83% DE TODOS LOS HOMBRE, MIS HERMANOS, imparte clases de crimen y del terrorismo más vil: LA INDIFERENCIA.
Hace algo más de un año que a la marea negra de petróleo de las costas de Galicia reaccionaba mi pueblo con indignación y dignidad, denunciando y movilizándose antes de que el poder político lo hiciera y los partidos le instrumentalizaran. Hace menos de un año que más de dos millones de personas salieron a la calle para gritar NO A LA GUERRA de Irak. El éxito también ha movilizado a la carroña politiquera oportunista que ahora, en vísperas de las elecciones, tratará de aprovechar otra aborrecible postguerra más. Pero también hace ahora un año te recordaba que mis hermanos se estaban muriendo en las costas del estrecho, en otra marea mucho más ignominiosa. Ya se han contado más de 100 muertos en este año y no ha habido ni por asomo una reacción como merecen. Ni la asistencia a los funerales, con todos los honores, de nuestros responsables políticos y sindicales de todos los signos, ni la movilización masiva de todos los ciudadanos de toda España. Aquella marea era negra. Pero estas muertes no parecen tener parangón con aquello. También te recordé que las guerras contaban con más de 73 escenarios en el mundo, y que es más que canalla y mezquino que sólo una movilice nuestra conciencia.
Hermano, pueblo mío: yo te escribo desde todos los frentes. Te escribo desde todas las guerras. Te escribo en la trinchera en donde todos los débiles y los oprimidos de la Tierra tratan de defenderse de los fuertes y poderosos.
Te escribo para que sepas que no estás fuera de ella. Ni siquiera en la retaguardia. Te escribo para recordarte que si no quieres estar de parte de las víctimas de las que sé que formas partes, tu corazón y tus acciones, sin remedio, se pondrán de parte de los que nos aplastan.
Te escribo desde el FRENTE, desde el FRENTE de la GUERRA DEL HAMBRE, DESDE EL FRENTE DE LA GUERRA DEL PARO, EL TRABAJO ESCLAVO Y LA PRECARIEDAD; TE ESCRIBO DESDE EL FRENTE DE LA GUERRA A LOS MÁS DE 400 MILLONES DE NIÑOS ESCLAVOS.
A ti que crees estar en el oasis del bienestar, o a ti que te sientes, porque realmente lo eres, víctima. Te escribo para que no aceptes también ser mi verdugo. Te escribo para que no aceptes también ser mi verdugo. Tienes que saber que no hay problema ecológico más grave que el hambre. Tienes que saber que no hay problema sanitario, educativo, económico más grave que el hambre. Tienes que saber que no hay causa más importante de emigración que el hambre. Tienes que saber que no hay problema de terrorismo, ni problema contra la vida más importante que el hambre. Tienes que saber que no hay problema más importante para la PAZ que el hambre. Tienes que saber que hay hambre, porque impera un sistema asesino. Tienes que saber, pueblo mío, que EL PROBLEMA POLÍTICO MÁS IMPORTANTE ES EL HAMBRE.
Millones de hermanos míos, sólo en el siglo pasado, vivieron el infierno de las guerras mundiales. Millones de hermanos nuestros aquí vivieron el infierno de la guerra entre hermanos y del hambre. Millones de personas aún guardan en su memoria la impronta de aquel terror, de aquellos campos de concentración. Hoy, en pleno siglo XXI, cuando no han pasada ni tres generaciones, mi pueblo de España parece que ha decidido borrarme de su conciencia y ser cómplice, con su silencio y su mezquindad política de un holocausto que sigue existiendo. No podemos, pueblo mío, ser cómplices con nuestro silencio de este campo de exterminio que es el hambre. Esta es la verdad que ahora, como gritaba el poeta, es necesario proclamar en medio de una época de confusión sangrienta, de desorden ordenado, de capricho planeado, de humanidad deshumanizada. NO PODEMOS PERMITIR QUE ESTO SEA CONSIDERADO NATURAL. Y NO PODEMOS PERMITIR LA MENTIRA que trata de explicarla. No es el SIDA la causa de nuestra muerte, ni la amenaza de mis hermanos en Africa (la malaria causa 15 veces más muertes que el Sida y no hay opinión pública sobre ella ni parecida ni comparable a la del Sida)… NO ES EL SIDA sino el HAMBRE. Y no son nuestros muchos hijos la causa de nuestra hambre, tampoco las sequías y las catástrofes naturales, ni la falta de alimento, ni tan siquiera los gobiernos corruptos o los corruptores. El hambre no dejará de existir mientras no deje de ser un negocio consentido políticamente. El hambre no dejará de existir mientras no deje de ser un negocio consentido políticamente.
Hay hambre en el mundo porque impera un sistema asesino. Mientras Europa prepara una Carta de los derechos de los animales y sus vacas reciben una subvención diaria de tres euros, cada hermano nuestro africano tendrá que afrontar su vida con menos de un euro diario. Y por eso huyen del hambre. Para vivir al menos como nuestros animales. Te escribo, pueblo mío, para dejártelo muy claro. Este mundo nos parece un mundo sin alma, donde en lugar de pueblos, parece haber mercados; donde en lugar de ciudadanos, nos tratan como consumidores; donde en lugar de hermanos, quieren que aceptemos las fronteras nacionalistas siempre insolidarias. Esas que inventaron ellos, para preservar la riqueza y los privilegios que les hicimos nosotros, los emigrantes de todos los tiempos, los débiles, los que nunca supimos de fronteras ni nacionalismos estrechos y viles, los que nunca tuvimos fronteras para ejercer de esclavos, porque nuestro hambre y miseria no tiene fronteras. Nunca ha sido menos democrática la economía mundial, nunca ha sido el mundo más escandalosamente injusto, ni nunca tantas víctimas se identificaron tan sumisamente con los verdugos. Y nunca ha sido tan posible acabar con el hambre, con el paro y con la esclavitud infantil. ¿Se lo vas a exigir, negándote a darles su apoyo si no lo hacen, a los partidos políticos cuando prometan acabar con los problemas que tenemos?
Te escribo, pueblo mío, porque me duele el hambre que acabará más tarde o más temprano doliéndote a ti: EL HAMBRE DE JUSTICIA. Pregúntate: ¿Quiénes son los que sufren?. Tal vez no los reconozcas, pero te llaman y te dicen: sufrimos. Te llamo y te digo: tu pueblo, tu pueblo desdichado, entre el monte y el río, con hambre y con dolores, no quiere luchar sólo, TE ESTÁ ESPERANDO, AMIGO. Y tú, amigo, HAS NACIDO EN EL CEREBRO DE ESTE MONSTRUO QUE NOS EXTERMINA: ES AQUÍ DONDE TIENES QUE TRABAJAR Y COMBATIR.
ACTO SEGUNDO: UN MINUTO DE SILENCIO Y LECTURA DEL MANIFIESTO.
(Se reparten las velas, la octavilla informativa y la hoja para dejar la dirección. Se encienden las velas. Música de fondo)
Ahora, os invitamos a tener un minuto de silencio para hacer presente en nuestra conciencia y en la de nuestro pueblo, para hacer patente a la opinión pública, a todas las víctimas de la injusticia en el mundo que también son víctimas de la mentira.
LECTURA DEL MANIFIESTO.
ACTO TERCERO: INVITACIÓN FINAL.
Creemos que es un deber de solidaridad tener que contar con todos vosotros para próximas acciones por la justicia que llevemos a cabo. Por ello os pedimos que os acerquéis al puesto de publicaciones a dejarnos vuestra dirección o correo electrónico. Hasta pronto en la lucha por la Justicia.
Gracias
MOVIMIENTO CULTURAL CRISTIANO