TRAFICANTES DE LA SOLIDARIDAD

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Es doloroso decirlo, pero se hace necesario denunciar y difundir la manera en que determinadas grandes empresas están haciendo negocio y lavando su imagen, a costa del dolor y la muerte de los niños del mundo, todo ello con el beneplácito y complicidad de UNICEF (organismo especializado de la ONU, creando para la defensa de la infancia). Ojeando la revista española de este organismo, que preside Joaquín Ruíz Jiménez, se puede ver claramente cómo los organismos internacionales están, de una u otra forma, sirviendo a los intereses del capital transnacional. No entro a valorar a las personas, sino la objetividad de los hechos. En la contraportada se puede leer: «Proyecto Empresas pro Unicef. El proyecto está destinado a todas las compañías que se sientan solidarias con los niños y quieran contribuir a mejorar sus condiciones de vida. Importantes beneficios fiscales y de imagen para que las empresas participen en el proyecto». Aparecen algunos logotipos de compañías como Mobil, Shell, Endesa, Volvo y Ford

TRAFICANTES DE LA SOLIDARIDAD

Jesús Benítez. Abogado
13/11/2003

1.- HISTORIA

l origen de la ayuda está en el diseño político que hacen las potencias vencedoras de la II Guerra Mundial de lo que sería el sistema político y económico mundial. El Plan Marshall, ejemplo de ayuda para la reconstrucción de Europa tras la Guerra, tenía un gran condicionamiento político y militar y se hacía, en general, en países de larga tradición capitalista. Aquí en España llegó el Plan Marshall a cambio de bases militares en nuestro territorio, estratégicas para la zona del Magreb y Oriente Medio, así como condicionantes comerciales, según los cuales estábamos obligados a comprar productos estadounidenses, abriéndoles el mercado.

La idea subyacente era la de que el crecimiento económico del mundo dependía de la potencias vencedoras de la II Guerra Mundial y que ésta ayuda servía para asegurar los intereses financieros y comerciales de aquellas, y aliviar alguna que otra catástrofe.

Es entonces cuando nacen una serie de organismos como el FMI, el BM, el aparato de la ONU con sus organismos especializados como la UNICEF, OIT, OMS y otros que, teóricamente, nacieron para unos fines, pero que a lo largo de todas estas décadas han mostrado, a juzgar por los hechos y la situación del mundo, que no son sino organismos manipulados, directa o indirectamente, por los países enriquecidos y al servicio de sus intereses, por acción u omisión.

En 1969, la Comisión Pearsons establece como objetivo el 0,7% del PNB de los países del Norte para desarrollo. La década de los setenta fue la que más reuniones y literatura produjo con respecto al desarrollo. Se debatió el contenido de un Nuevo Orden Económico Internacional (NOEI), pero sólo se dictaron resoluciones no vinculantes para los Estados. La década de los ochenta ha sido denominada la década perdida del desarrollo y es cuando se inicia y apuntala el perverso flujo de capital desde el Sur hacia el Norte, por medio de la deuda externa. La década de los noventa son la era del cinismo y el abandono, donde se celebran cumbres sobre el Hambre, la Infancia, la mujer, el medio ambiente, etc., para acabar concluyendo que hay demasiados niños en el mundo. Ésta es la gran tragedia de nuestros siglo, un mundo injusto, provocando dolor y muerte en serie de forma permanente, ante el cinismo y manipulación de quienes nos beneficiamos objetivamente de esta situación. Y así, mitos como el de la superpoblación y la falta de alimentos se instalan en las conciencias de los habitantes del Norte, para auto justificar y legitimar el orden existente.

2.- FILOSOFÍA DE LA AYUDA

La concepción de la ayuda al desarrollo no parte de un punto de partida neutral. Es la economía de mercado, el neoliberalismo, lo que subyace como presupuesto. La concepción de desarrollo que impusieron los países del Norte era la de que el subdesarrollo del Sur era algo temporal, cuestión de tiempo y de aportar recursos. El subdesarrollo es una fase anterior al desarrollo. Es lo que se ha llamado la concepción lineal del desarrollo. Por tanto, el problema del subdesarrollo no es el sistema económico y político imperante sino un problema técnico En esto coinciden fundamentalmente las dos grandes corrientes socio-políticas más importantes: la socialdemocracia y la democracia-cristiana, pues no ponen en cuestión radicalmente el sistema.

Por otro lado, frente a las corrientes mencionadas anteriormente avanza a pasos agigantados entre la población y el mundo empresarial y político la concepción neoliberal dura, que incluso justifica la ayuda como necesaria para dar salida a los excedentes y para corregir las distorsiones que se crean en el mercado. En ningún momento se cuestiona por nadie el papel de las multinacionales, la división internacional del trabajo, en definitiva, el Robo Norte-Sur. El discurso que se hace dentro del mundo institucional sobre la ayuda al desarrollo no es transformador sino reformista.

3.- CLASES DE AYUDA.

* Ayuda de Proyectos:

Es el método más usado por el Banco Mundial y consiste en la financiación de carreteras, grandes centrales eléctricas, sistemas de riesgo y otras infraestructuras. Suelen crear dependencia, ya que la financiación no es total y en un tiempo corto comienza la necesidad de suministros, que proceden de empresas del Norte. Son operaciones que hacen que los resultados se vean pronto, por lo que el impacto en la opinión pública está asegurado, pero se suelen hacer sin contar con las verdaderas necesidades del Sur, creando además graves impactos ambientales (destrucción del medio ambiente, poblados…)

* Ayuda a Programas:

Es el método usado por el Fondo Monetario Internacional y consiste en suministros de capital. Se influye descaradamente en la política económica de los países receptores, pues se les imponen condiciones financieras abusivas y se les impide destinar recursos a gastos sociales, de educación… pues para FMI, quien tiene una deuda, tiene que trabajar mucho y gastar poco, y lo que se gaste no debe ser un gasto improductivo (educación, sanidad, alimentación…). Se les obliga a adoptar los llamados planes de ajuste estructural.

* Ayuda bilateral:

Es el método usado por los Estados del Norte y consisten en créditos oficiales gubernamentales que se usan como instrumento de política exterior, predominando los intereses estratégicos y militares.

* Ayuda Multilateral:

Es el método utilizado por organismos internacionales, que están manipulados y manejados por los intereses de las grandes empresas y países enriquecidos.

* Asistencia técnica:
Es la transferencia de conocimientos mediante la provisión de expertos, asesores, adiestramiento de personal, etc. No rompe el monopolio tecnológico del Norte y sirve para transferir tecnología obsoleta y contaminante. También sirve para el llamado robo de cerebros.

* Ayuda de emergencia:

Es la realizada en situaciones de catástrofes (inundaciones, terremotos, etc.). También existen condicionantes (como por ejemplo, que el receptor se comprometa a servir de cementerios nucleares de los residuos del Norte). También se dan peligrosos efectos de opinión pública (pues se instaura en la población del Norte, que el problema de la proeza es debido a desastres naturales).

* Ayuda alimentaria:

Fundamentalmente consiste en cereales. Es una forma barata de acabar con los excedentes del Norte, instrumentalizando la ayuda políticamente. En receptores, por lo que se trastocan sus sistemas alimentarios y se desincentiva la producción de alimentos.

4.- CRITICA A LA AYUDA OFICIAL AL DESARROLLO.

* Las cantidades donadas no son significativas: la ayuda supone un 10% de los que el Sur pierde a través del comercio internacional y un 50% de lo que pierden a través de la deuda externa. La ayuda no llega al 0,35% del PNB del Norte, mientras que hay países (como por ejemplo en Africa) que destinan un 20% de su riqueza en engordar al Norte. ¿Qué sentido tiene hablar de dar el 0,7% cuando se les expolia el 20% de su riqueza?

* La ayuda no sirve para paliar las necesidades de los empobrecidos: gran parte de la ayuda va destinada a los terratenientes para la producción de alimentos que después son comprados a precios bajos; no se otorgan ayudas a los países más hundidos, sino a los que interesan estratégicamente; el Tercer Mundo gasta inmensas cantidades de dinero en armamento, vendido por empresas estatales y privadas del Norte como ayuda al desarrollo.

* Con las ayudas se provocan entre los países del Sur la dependencia con respecto al donante y la división e insolidaridad entre los propios países del Sur, los cuales no se asocian para luchar enérgicamente por unas relaciones de Justicia.

* La ayuda sirve de negocio, pero también como maquilladora de la situación. Es fácil comprobar cómo en la opinión pública hay quienes piensan que se está ayudando mucho (sin tener conciencia del robo) y otros piensan que aquí también hay muchos problemas y que no habría que ayudar tanto. Es el esperpento de un sociedad que se beneficia, sabiéndolo o no, de la opresión, pero que no es consciente de ello o no quiere serlo, y en todo caso se cree buena, solidaria y que los poderes públicos y privados están haciendo todo lo que pueden por remediar la situación.

6.- TRAFICANTES.

Es doloroso decirlo, pero se hace necesario denunciar y difundir la manera en que determinadas grandes empresas están haciendo negocio y lavando su imagen, a costa del dolor y la muerte de los niños del mundo, todo ello con el beneplácito y complicidad de UNICEF (organismo especializado de la ONU, creando para la defensa de la infancia). Ojeando la revista española de este organismo, que preside Joaquín Ruíz Jiménez, se puede ver claramente cómo los organismos internacionales están, de una u otra forma, sirviendo a los intereses del capital transnacional. No entro a valorar a las personas, sino la objetividad de los hechos. En la contraportada se puede leer: «Proyecto Empresas pro Unicef. El proyecto está destinado a todas las compañías que se sientan solidarias con los niños y quieran contribuir a mejorar sus condiciones de vida. Importantes beneficios fiscales y de imagen para que las empresas participen en el proyecto». Aparecen algunos logotipos de compañías como Mobil, Shell, Endesa, Volvo y Ford. El mismo día, puede ver en la prensa un informe sobre los incendios provocados en la Amazonia por los buscadores de oro y las grandes compañías petroleras y madereras, a las cuales interesa la esquema de selva, incluidos, si es preciso, los poblados de tribus indígenas ancestrales que allí se encuentran desde hace siglos.