Plantearse la lucha por la Justicia con radicalidad ha traído no pocos enfrentamientos institucionales al Movimiento Cultural Cristiano (MCC). Después de más de 20 años exigiendo a los partidos políticos que planteen en los tres primeros puntos de su programa electoral acabar con el hambre, el paro y la esclavitud infantil, los resultados son: insultos y agresiones físicas, amenazas telefónicas, mentiras y difamación, destrozo de materiales, agresiones a las Casas de Cultura y Solidaridad que tenemos distribuidas por toda España, confiscación de materiales solidarios, denuncias, trabas burocráticas múltiples en ayuntamientos, detenciones… y ello con implicaciones de todos los partidos políticos (PP y PSOE de Santander, Guadarrama y Madrid, Democracia Nacional en Alcalá de Henares, I.U de Santander, PSC de Reus, BNG en Galicia y partidos independentistas gallegos como AGIR, NOS-Unidade Popular, etc).
Por R.B.
Revista Autogestión enero 2005
Nuestro mundo vive una situación trágica como nunca se había dado en la historia de la Humanidad. Mientras en el Hemisferio Norte los excedentes de alimentos constituyen un problema, tres cuartas partes de la Humanidad se ven abocadas al hambre y a la miseria progresiva.
La cascada de aconteci-mientos diarios, que no nos des-pisten. Guerra contra Irak, Afganistán, terroris-mo, guerrillas, sida, choque de civili-zaciones, desajustes, crecimientos económicos, no son el mayor problema de la humanidad. Por mucho que insistan los homosexuales que el suyo es el mayor problema, o por mucho que insistan los profesores de la escuela estatal que aquello del laicismo es el mayor problema, o por mucho que insistan los nacionalista que el reconocimiento de su idioma local es un grandísimo problema, el HAMBRE, el mayor crimen que se está realizando en el mundo….repito: El hambre es, y con mucha diferencia el problema más importante que el ser humano tiene planteado a principio del siglo XXI.
El hambre es la forma más común de morir. Es la principal causa de en-fermedad y el mayor problema sani-tario. El problema económico más im-portante. El problema político más grave. El pro-blema ecológico más importante. El hambre es el problema más importante de la Jus-ticia. El problema más importante para la paz.
Constatamos cómo en estos últimos años se han producido cambios vertiginosos que han hecho más difícil la vida a los empobrecidos de la tierra. El poder de los grandes: fusiones bancarias, grandes conglomerados de las telecomunicaciones, alianzas regionales de los grandes, nuevos organismos internacionales, etc están configurando el mundo. Mientras tanto, los movimientos de solidaridad del Norte eluden el enfrentamiento quedándose en la filosofía del pequeño proyecto, la pequeña ayuda, el apadrinamiento individual, los 0,7…etc. En nuestra opinión, un fraude a la solidaridad.
La dimensión internacional de los problemas exige una nueva mentalidad a la hora de abordarlos. Desde ahí inicia la Campaña del Movimiento Cultural Cristiano -movimiento apostólico de la Iglesia católica: su nacimiento hace ya más de 20 años, es la continuación de la historia de los empobrecidos y su liberación- su andadura, planteando el hacer pública en la calle la denuncia de las causas del hambre, del paro y de la esclavitud infantil. El principal objetivo de la Campaña por la Justicia en las relaciones Noret-Sur: contra las causas del hambre, paro y esclavitud infantil: no matarás, es el de crear opinión pública solidaria que sea capaz de generar presión moral liberadora a las instituciones y estructuras que gobiernan el mundo. Y todo ello ha venido realizándose desde la más absoluta gratuidad de los militantes que la han llevado a cabo, sin subvenciones ni ayudas de ningún tipo.
Plantearnos la lucha por la Justicia con radicalidad nos ha traído no pocos enfrentamientos institucionales. Después de más de 20 años exigiendo a los partidos políticos que planteen en los tres primeros puntos de su programa electoral acabar con el hambre, el paro y la esclavitud infantil, los resultados son: insultos y agresiones físicas, amenazas telefónicas, mentiras y difamación, destrozo de materiales, agresiones a las Casas de Cultura y Solidaridad que tenemos distribuidas por toda España, confiscación de materiales solidarios, denuncias, trabas burocráticas múltiples en ayuntamientos, detenciones… y ello con implicaciones de todos los partidos políticos (PP y PSOE de Santander, Guadarrama y Madrid, Democracia Nacional en Alcalá de Henares, I.U de Santander, PSC de Reus, BNG en Galicia y partidos independentistas gallegos como AGIR, NOS-Unidade Popular, etc).
Una de las últimas agresiones
Hace dos años, por unanimidad de todos los partidos políticos, y a petición del Movimiento Cultural Cristiano, el Ayuntamiento de Santander aprobó la Moción contra la Esclavitud Infantil, comprometiéndose con este acto a apoyar todas aquellas iniciativas tendentes a denunciar públicamente esta situación y a dar a conocer esta realidad.
Sin embargo, se han dado, durante mucho tiempo y en especial en los últimos dos años, otros hechos que demuestran que el Ayuntamiento, no sólo no facilita que esta labor se lleve a cabo, sino que persigue a quienes sí quieren implicar su vida en ello.
Así, sistemáticamente no da respuesta a numerosas peticiones de permisos para poder denunciar en la vía pública el genocidio del hambre, la lacra del paro, el crimen de la esclavitud infantil, y los demás atentados a la vida y dignidad de las personas, ha obligado a retirar puestos y exposiciones informativas sobre estos temas, ha denunciado penalmente a quienes desarrollaban estas actividades de forma desinteresada, siendo -siempre absueltos, ha incoado numerosos expedientes sancionadores por supuestas infracciones de ordenanzas, ha obstaculizado el legítimo derecho de manifestación, dándonos la razón el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, y ha llegado a incautar nuestras publicaciones, sentenciando el Juzgado de lo Contencioso n°3 que se vulneraban nuestros derechos constitucionales, obligando a que dichas publicaciones sean devueltas.
El último hecho acontecido ha sido la denuncia a tres mujeres miembros del MCC por supuestas injurias, cuyo juicio se ha celebrado el pasado 6 de octubre, conociéndose la sentencia ya en el momento: absolución para las tres personas.
Por todo ello, ese mismo día se realizó una marcha silenciosa, partiendo de las Juzgados de «Las Salesas» hacia la Plaza del Ayuntamiento, y una concentración silenciosa en dicha plaza, con más de 50 asistentes, no 20 como dijo la prensa cántabra.
La respuesta del ayuntamiento de Santander, al día siguiente de realizarse este acto legítimo de opinión pública, fue la propia de este tipo de instituciones: negar todos los hechos e injuriar al Movimiento Cultural Cristiano.
Tras todo esto podemos afirmar que el Ayuntamiento de Santander persigue y pone trabas al trabajo de esta organización apostólica, pero el tiempo siempre acaba poniendo a todos en su sitio y nosotros no dejaremos de luchar para que en Santander se hable y se tenga presente a los empobrecidos de la tierra.
Seguiremos por el mismo camino
Estamos aquí para decir que ya es hora de un cambio, de un programa político y un comportamiento político fundamentalmente moral, en el que el hambre, la ignorancia, la esclavitud infantil, el paro y la precariedad, etc., se propongan como problemas a desaparecer ya, sin mendiguismos, ni limosnerismos. Un programa político en el que se planteen los cambios necesarios para que por primera vez la democracia se organice como poder del pueblo, por el pueblo y para el pueblo, es decir democracia real: autogestión.
Poder del pueblo: no del señorito, no del cacique, no del vividor, sino del pueblo, los sin voz, los oprimidos, los silenciados, los excluidos.
Por el pueblo: porque es el pueblo el que hace a los países, genera riqueza, porque sólo el trabajo genera riqueza, hace solidaridad, construye fraternidad. Debe el pueblo, pues, decidir sobre su vida personal y colectiva, es decir autogestionar la sociedad.
Para el pueblo: Todos los empobrecidos de la tierra tienen derecho a dejar de serlo. El hambre, el paro y la esclavitud infantil pueden y deben desaparecer. No hay razón para que existan y menos para que haya 4.000 millones de hambrientos, 1.600 millones de parados y 400 millones de niños esclavos.
Hoy es más necesario que nunca que asociaciones de hombres y mujeres libres hagan de la solidaridad su razón de ser. Por eso, la Campaña por la Justicia en las relaciones Norte-Sur: contra las causas del hambre, paro y esclavitud infantil: no matarás, es más necesaria que nunca, para transmitir la esperanza de los que luchan, para invitar a dar sentido a la vida siendo solidarios con los empobrecidos de la tierra, aunque ello haya supuesto y suponga persecución e incomprensión.
AYUNTAMIENTO DE SANTANDER
El 6 de octubre de 2004 en un Juzgado de Santander se juzgó el «gravísimo» delito de divulgar, como legitima la Constitución, publicaciones, tanto revistas como libros. Peor que con Franco. A la Editorial ZYX el franquismo nos autorizó a hacer este trabajo, hoy, la «democracia, por hacer la misma labor, nos lleva al Juzgado.
¿Pretende con ello cubrirse de gloria el PP, PSOE y Regionalista como segundones de la derecha? ¿Tendremos que presentarnos los militantes del SAIn a las próximas municipales en Santander para que la cultura se divulgue en Cantabria sin cacicada ninguna? Derecho a ello tenemos.
La acusación a Esther, Blanca y María Luisa por injurias contra el ayuntamiento, a quien se llamó insolidario por no permitir la difusión de publicaciones solidarias con los empobrecidos, es digna de los tiempos más duros del franquismo. Pero es evidente que desde el punto de vista de los empobrecidos se trata de un acto de solidaridad.
Demostremos que cultivar la solidaridad no sólo no es una injuria sino que es un honor y como tal debe ser reconocido.
Julián Gómez del Castillo,
expresidente de la HOAC en Cantabria