El asunto ha salida a la luz tras el informe realizado por un trabajador al Comité Nacional del Trabajo Chino. En el caso de Microsoft, los niños esclavos trabajan directamente para KYE System, un gigante chino ubicado en la ciudad de Dongguan.
Fabrican los «ratones». Jornadas de trabajo que arrancan a las 6,30h. de la madrugada y que se prolongan a lo largo de 16 horas y media. Cuentan con apenas media hora para comer que, por supuesto, no se remunera.
No llegan a cobrar 113 dólares mensuales. Apple tiene subcontratada buena parte de la fabricación de sus productos a Foxconn, una empresa ubicada en la ciudad de Shenzhen. Entre ellos el iPad.
La presión con la que se trabaja acarrea numerosos intentos de suicidios. Se puede no querer ver, se puede especular y verter ríos de tinta sobre las ventajas o desventajas en la «salud» mental de nuestros hijos… Pero aquí queda dicho bien claro para el que quiera oír.
No es la realidad la que se equivoca, son nuestros ojos los que no quieren ver… por más «información» que nos pongan delante los ordenadores.