En la mañana del 9 de marzo, tres mujeres miembros del MCC junto con sus dos bebés, estuvieron repartiendo octavillas en la Plaza del ayuntamiento de Santander, llevando encima un cartel denunciando al ayuntamiento de insolidario por los hechos que se vienen sucediendo contra el Movimiento Cultural Cristiano en su campaña contra las causas del Hambre, del Paro y de la Esclavitud Infantil…
En la mañana del 9 de marzo, tres mujeres miembros del MCC junto con sus dos bebés, estuvieron repartiendo octavillas en la Plaza del ayuntamiento de Santander, llevando encima un cartel denunciando al ayuntamiento de insolidario por los hechos que se vienen sucediendo contra el Movimiento Cultural Cristiano en su campaña contra las causas del Hambre, del Paro y de la Esclavitud Infantil.
Poco tardó la policía municipal en pedirles, en una actitud intimidatoria, los DNI, tomando todos sus datos y las frases de los bocadillos.
Eso sí, al lado había un puesto del PP pegado a la fachada del ayuntamiento, y militantes del PSOE en la misma plaza, todos repartiendo folletos de propaganda electoral. A ello no se les pidió el DNI.
Como ciudadanos de una sociedad democrática exigimos nuestro derecho constitucional a manifestarnos y expresarnos libremente, sin coacciones ni amenazas, y a que la Voz de los Empobrecidos y la denuncia de las causas del Hambre, del Paro y de la Esclavitud Infantil estén en las calles. TAMBIÉN EN LAS DE SANTANDER.