En un programa de debate de la cadena TMT el historiador Ricardo de la Cierva ha dicho que el presidente del Gobierno y otros ocho ministros de su Gabinete, entre los que se encuentra María Teresa Fernández de la Vega, pertenecen a la Masonería. Caso curioso, según lo desvelado por De la Cierva es el del ministro Bono que, según el historiador, pertenece a la paramasónica Orden Martinista Sinárquica. «El señor Bono cree que es compatible» con el cristianismo cuando la Iglesia Católica lo ha rechazado radicalmente, recordó De la Cierva.
A la pregunta de hasta dónde llega la influencia de la Masonería en la manipulación de la historia, Ricardo de la Cierva ha explicado en qué consiste esencialmente el movimiento masónico: «En arrancar del contexto social a la Iglesia católica». Asimismo ha revelado que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, es masón. «Hace escasos dos meses, declaré en la revista Alba que Zapatero era miembro de la Masonería, y él no dijo nada. Más adelante el gran maestro de la Logia 286 de Nueva York me confirmó su pertenencia».
Pero De la Cierva, no sólo confirmó la pertenencia de Zapatero a la Masonería, sino que también afirmó que ocho ministros socialistas, entre los que se encuentran la vicepresidenta del Gobierno María Teresa Fernández de la Vega y el ministro de Defensa José Bono, participan en el movimiento masónico. Bono, en palabras de Ricardo de la Cierva «pertenece a una rama masónica sinárquica que se expresa como Masonería cristiana». «El señor Bono cree que (la Masonería) es compatible» con el cristianismo cuando la Iglesia Católica lo ha rechazado radicalmente, recordó De la Cierva.
Hace meses, la web El semanal digital informó de que el director general de la Guardia Civil, Carlos Gómez Arruche, también pertenecía a la misma Orden Martinista Sinárquica que José Bono.
Asimismo, De la Cierva afirmó que en Madrid existen logias encubiertas que no dan sus nombres. El historiador, citando a Manuel Guerra y a su obra «Diccionario enciclopédico de sectas», señala que en la capital española «existen dos logias encubiertas formadas por miembros del Partido Popular». «Y dos en Barcelona en donde se encuentran miembros del actual Gobierno catalán», aunque en este caso, no quiso dar nombres, hasta no conocerlos fehacientemente.