Estamos en un mundo en guerra donde los débiles, los empobrecidos siguen perdiendo.
Durante esta pandemia se han acelerado muchos procesos que ya estaban en marcha contra la humanidad, muchos de ellos tendentes al control de la población, de reconfiguración de la economía 4.0 donde millones de personas serán excluidas.
En medio de esta pandemia, geopolíticamente hablando, el papel y el poder de China es creciente en el mundo, con visión largo plazo de su estrategia. China está imponiendo una forma de hacer política y de escalar su poder tanto en los países enriquecidos y empobrecidos. La guerra por el control del 5G tanto en Europa como en el resto del mundo es una de las expresiones de la guerra a la que asistimos. Mientras esto ocurre millones de personas siguen muriendo de hambre en países condenados a la miseria y a la violencia, condenados a ser expoliados en sus riquezas y ahora, a morir por el virus del Covid-19 o de malaria.
Siendo difícil comprender un mundo tan complejo como el actual, tan diverso, hemos de hacer un esfuerzo en nuestro análisis. Tengamos en cuenta que unos pocos controlan la “gestión del cambio” de época que se está produciendo. También es de señalar la importancia de la aceleración de procesos producidos por el Covid. Se ha dado una vuelta de tuerca contra la humanidad muy profunda, y muchos de los cambios producidos han venido para quedarse. El miedo como forma de atenazar a la sociedad, el desprecio a la vida (muerte de personas mayores), los experimentos de control sociológico con las distintas plataformas digitales, la oferta del subsidio orillando la necesidad de un trabajo humano que sea digno, son realidades que se han mostrado claramente.
Creemos que hay una reestructuración del sistema neocapitalista. Ante esta realidad de control de población y de poder hemos de responder con estrategias solidarias adecuadas a la agresión que sufren nuestros hermanos. Una estructura institucional empuja en la dirección de convertir a la humanidad en datos, en material desechable y editable si es necesario. Empujemos en sentido contrario, necesitamos estructuras de Gracias que empujen en sentido contrario al imperialismo. Seguiremos profundizando en este encuentro de militantes.
Redacción Solidaridadnet