El magnate más poderoso de América Latina, cuyo patrimonio la revista Forbes calcula en cerca de 13.000 millones de dólares, aumenta su imperio al invertir 400 millones de dólares en la brasileña Embratel. Financió al PRI, que estuvo en el poder siete decenios, pero también apoyó al conservador PAN, que gobierna desde 2000. Carlos Slim fiinanció campañas del PRI, régimen que estuvo en el poder durante siete decenios, pero también apoyó al conservador Partido Acción Nacional (PAN), que gobierna desde diciembre del año 2000. Igualmente frecuenta ámbitos de la izquierda. No hay amigo, o enemigo, pequeño. ´No pertenezco a ningún partido político. Doy dinero a cualquier candidato que me lo pide porque apoyo incondicionalmente el proceso democrático´, declaró en una ocasión a la revista Newsweek. Martínez señala en su libro que ´la sombra que más ha asediado´ a Slim ´es la relación que mantuvo con el ex presidente Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), aunque su cercanía con el poder lo ha llevado a tener contactos con todos los presidente en las dos últimas décadas´. De hecho, debió explicarse a fondo cuando, al frente de un consorcio en el que participaban Bell International Holding Co. y France Cable & Radio, ganó la joya de la corona, el monopolio Telmex, privatizado en una licitación organizada por Salinas de Gortari. La oposición impugnó el resultado de aquella polémica subasta, y aunque se le acusó de ser un testaferro de Salinas, para quien se pidió juicio político, ningún juzgado objetó la validez de la venta. Hosco, habil negociador y asesorado por su amigo y ex presidente del Gobierno Felipe González, el magnate mexicano Carlos Slim pretende vencer a Telefónica, el grupo presidido por Cesar Alierta, en la carrera por Iberoamérica. Sostiene que «el mejor negocio para el empresario es que no haya pobreza». Sin embargo, hizo su fortuna en un país de empobrecidos en el que 5% de la población concentra más del 60% de la riqueza. Asociado con Bill Gates,el hombre más rico del mundo, Slim tiene de su lado en los negocios a dos de los más reconocidos futurólogos, Alvin Toffler y Nicholas Negroponte, no en balde Time lo ubicó como uno de los hombres claves de la globalización.
Elaborado por Solidaridad.net
El magnate mexicano Carlos Slim Helú, el empresario más rico de Latinoamérica dueño de Teléfonos de México (Telmex) se hizo de la Empresa Brasileña de Telecomunicaciones (Embratel), con una inversión de 400 millones de dólares. Ha sido la última gran operación de Carlos Slim, constructor de un imperio que emplea a más de 200.000 personas y supone el 40% de la capitalización total de la Bolsa de México. Junto a Bill Gates y Robert Rubin figura entre los 25 ejecutivos de las empresas más influyentes del mundo, de acuerdo con una clasificación de la cadena CNN y de la revista Time
Este capitán de empresas continúa el trabajo de una dinastía libanesa que llegó a México hace un siglo, huyendo del yugo otomano, y arrancó en el mundo de los negocios con la mercería y juguetería La Estrella de Oriente. El magnate más poderoso de América Latina, de 64 años, cuyo patrimonio la revista Forbes calcula en cerca de 13.000 millones de dólares, dice que su principal trabajo consiste en «pensar». Sus hijos deberán hacerlo a fondo para emular el legado que ha dejado su progenitor.
Sus negocios, que incluyen asuntos tan diversos como restaurantes, tiendas, teléfonos, banca, construcción o investigación informática, aportan anualmente al fisco más de 5.000 millones de dólares. La valoración de Telmex en el mercado fue calculada en torno a los 20.000 millones de dólares. Trabaja, según su propia confesión, por «responsabilidad social y empresarial» y también trabaja por necesidad emocional.
Telmex, Carso e Inbursa los buques insignia
El olfato del empresario, ingeniero civil, padre de seis hijos, que le han dado nueve nietos, es, en buena medida, herencia de su padre, el patriarca Julián Slim Haddad. Todavía niño, escuchaba sus reflexiones sobre la disciplina y el mundo de los negocios entonces, «vender mucho y a bajo precio», y retuvo la mayoría: disponer de efectivo para aprovechar las oportunidades; una de ellas, a los 15 años ya tenía 44 acciones de Banamex (Banco Nacional de México).
«A finales de 1952, cuando yo tenía 12 años, y con el fin de administrar nuestros ingresos y egresos», recordó a José Martínez, autor de Carlos Slim. Retrato inédito, «mi papá nos estableció (a todos los hermanos) la obligación de llevar una libreta de ahorros que revisaba con nosotros cada semana. Siguiendo esta regla, llevé mis balances personales varios años».
Sus hijos Carlos, presidente del consejo de administración de Telmex; Patricio y Marco Antonio, y sus yernos, Arturo Elías Jaime y Daniel Hajj, dirigen una diversificada constelación empresarial.
Carlos Slim financió campañas del PRI
Carlos Slim financió campañas del PRI, régimen que estuvo en el poder durante siete decenios, pero también apoyó al conservador Partido Acción Nacional (PAN), que gobierna desde diciembre del año 2000. Igualmente frecuenta ámbitos de la izquierda. No hay amigo, o enemigo, pequeño. «No pertenezco a ningún partido político. Doy dinero a cualquier candidato que me lo pide porque apoyo incondicionalmente el proceso democrático», declaró en una ocasión a la revista Newsweek.
Clientelismo político
José Martínez señala en su libro que Carlos Slim ha sido muy activo contra las imputaciones de quienes atribuyen una parte de su imperio a la especulación o al clientelismo político; también, contra las suspicacias de aquellos que encuentran en su alianza con el alcalde de México, el izquierdista Andrés Manuel López Obrador, para renovar el Centro Histórico de la capital federal, donde creció, una gran operación inmobiliaria o incluso política. El regidor es presidenciable y figura en primer lugar en las encuestas de popularidad previas a las elecciones generales del año 2006.
Su inconmensurable poder económico le ha conferido un halo muy especial. Muchos lo ven como un gurú de las finanzas, otros lo juzgan como un líder empresarial mediático que con el dinero cree resolverlo todo. Slim es de esos personajes que rehuyen a los medios y sólo aparece ante ellos cuando quiere dejarse escuchar o neutralizar algún asunto. Hay quienes interpretan esa actitud en un hecho irrefutable: Cuando el dinero habla, suele imponerse el silencio. Sostiene que «el mejor negocio para el empresario es que no haya pobreza». Sin embargo, hizo su fortuna en un país de empobrecidos en el que 5% de la población concentra más del 60% de la riqueza.
Polanco ( PRISA) y Carlos Slim (TELMEX)
Es sabido que la multinacional PRISA de Jesús de Polanco esta llevando a cabo una política de fuerte implantación política-mediática-empresarial-cultural en Iberoamérica. Llamó mucho la atención que Fox, el presidente de México, estuviese presente en la firma de un acuerdo comercial-mediático entre el hombre más rico de Iberoamérica, el mejicano Carlos Slim y propietario del complejo multimediático (Televisa, etc.) y telefónico Telmex (con el que se hizo gracias a la privatización llevaba a cabo por el ex presidente Salinas de Gortari, investigado por muy graves casos de corrupción) y Polanco propietario de PRISA.
Felipe González, ex presidente de España, acude regularmente a México, invitado por Slim en alguna de sus grandes posesiones y es el gran embajador de los negocios de Jesús de Polanco Slim también ha hecho negocios en Chile presentado por el socio de González, por Fernando Flores, ex ministro con Allende y que se ha convertido desde Estados Unidos, donde ha venido residiendo, en un gurú del management político-mediático-empresarial-filosófico.
El Grupo Prisa participa además con un 24,3% en Iberbanda, un operador de servicios globales de comunicación en banda ancha, en el que también están presentes Informática El Corte Inglés, Omega Capital, CajaDuero, Ibercaja, Caja San Fernando, Caja de Ahorros El Monte y Diario de Burgos. Iberbanda proporciona nuevas formas de acceso a Internet, transmisión de datos, telefonía y servicios de valor añadido en red, a través de radioenlaces y redes de fibra óptica. Y en esta empresa también participa el multimillonario mexicano Carlos Slim, asesorado habitualmente por Felipe González, que aparece a través de la empresa Sercotel, integrada en el Grupo Telmex (Teléfonos de México) que dirige Slim.
Aquí no conviene olvidar el siguiente maridaje o grupo de presión: Carlos Salinas de Gortari-Carlos Slim-Felipe González-Jesús Polanco-Emilio Azcáraga Jean, Antonio Navalón.
Sí, el comisionista Antonio Navalón, procesado por el caso Banesto en España como conseguidor de Mario Conde, es hoy el máximo responsable de Prisa en México. Es interesante recordar que César Alierta de la multinacional Telefónica se ha quejado muchas veces de que su principal competidor en América es Felipe González, que trabaja para Telmex.
Pues bien, Polanco, a través de González , Carlos Slim, así como Juan Azcárraga Jean, hijo del mítico Tigre Azcárraga y heredero del imperio de Televisa, el cuasi monopolio de la televisión en México forman la plataforma para entrar en Estados Unidos, concretada en un objetivo muy goloso: Univisión. Univisión es la gran cadena de televisión norteamericana (y de radio) en lengua castellana que llega a 40 millones de hispanos. Además el voto hispano es decisivo en las elecciones norteamericanas. Pues bien, Azcárraga Jean y Polanco junto a Carlos Slim, le disputan a Venevisión (grupo Cisneros) el control de Venevisión.
Encabeza la lista de Forbes
Con sus empresas (Telmex, Grupo Carso e Inbursa ) y sus activos junto con los 100 principales empresarios equivalen al 60% del Producto Interno Bruto, además de controlar él sólo con su grupo empresarial un poco más del 40% del mercado de valores
Por su poderío económico la revista Time incluyó a Slim uno de los 12 «jugadores claves» de la globalización en el mundo de los negocios. Desde que ingresó a la lista internacional de la revista Forbes, Slim se ha mantenido dentro del grupo de los ricos más ricos del mundo, su fortuna es estimada en más de 10 mil 800 millones de dólares.
A diferencia de otras publicaciones como Forbes que llamaron a Carlos Slim «El Conquistador» –es un apodo apropiado, argumentaron los editores de la revista de los multimillonarios– por su creciente imperio empresarial, Businessweek –la influyente revista de negocios de Wall Street– hizo un retrato crítico de Slim al que ubicó dentro de la «plutocracia protegida» por el gobierno del presidente Carlos Salinas de Gortari a quien señalaron de poner en las manos del magnate una auténtica «mina de oro» al adjudicarle la propiedad de Teléfonos de México. Los editores de Businessweek fueron directos sobre las recompensas de Salinas a sus amigos: «Rumores y alegatos de amiguismos rondan por todo el proceso de privatización En respuesta, el gobierno hace lo imposible por crear una impresión de imparcialidad. Por ejemplo, en la junta de gabinete que decidió quiénes serían los nuevos dueños de Telmex, los tres postores fueron nombrados A, B y C. Pero todos sabían quién era quién…»
Empresas controladas por Slim
Telmex controla cuando menos el 90 por ciento de todo el tráfico local y aproximadamente el 70 por ciento del tráfico de larga distancia, según los analistas.
Las empresas controladas por Slim representan actualmente casi el 50 por ciento del índice del mercado accionario de México. En Estados Unidos, tiene acciones en MCI y en Global Crossing, y es el dueño de la cadena CompUSA, en Estados Unidos y obtuvo acciones de las empresas Office Max, Circuit City, Borders
Su grupo financiero, Inbursa, se ha convertido en el prestamista de último recurso para empresas en problemas, dándole a Slim participación en algunas de las principales empresas del país, incluyendo a Grupo Televisa, la mayor empresa de medios en la lengua española en el mundo, así como el conglomerado industrial Desc-. De manera significativa, Slim retiene la dirección de su empresa de telefonía inalámbrica, América Móvil, la mayor en Latinoamérica. Previamente en este año, dicha empresa superó a Telmex como la mayor empresa registrada públicamente.
Desde hace tiempo, Slim y sus hijos están prestando más atención a las oportunidades de inversión en Estados Unidos. En los últimos años, la familia adquirió acciones en Philip Morris (ahora llamada Altria), OfficeMax y Saks Incorporated. En 1999, Telmex compró una participación mayoritaria en una firma de comunicaciones inalámbricas prepagadas de Miami llamada TOPPTelecom (TT) por $57.5 millones.
El Carso Grupo Telecom (CGT), el grupo de telecomunicaciones de Slim, apunta a consumidores de bajos ingresos, principalmente hispanos en Estados Unidos, que tienen muy poco o ningún acceso al crédito.
Recientemente un juez de la bancarrota despejó el camino para que Telmex adquiera una participación controladora en Embratel, la empresa brasileña de telefonía de larga distancia, por 400 millones de dólares, de manos de MCI. De manera similar, Telmex compró el 40 por ciento de la tercera empresa de telefonía de larga distancia en Chile y el control de Techtel, empresa argentina de datos. En febrero, cerró la adquisición de AT&T Latinoamérica por 207 millones de dólares.
Asociado con Bill Gates, el hombre más rico del mundo, Slim tiene de su lado en los negocios a dos de los más reconocidos futurólogos, Alvin Toffler y Nicholas Negroponte, no en balde Time lo ubicó como uno de los hombres claves de la globalización.
De cara al futuro Slim y Bill Gates se asociaron para poner en marcha un programa de telecomunicaciones en español a través de T1msn para dominar el mercado de América Latina, sólo como el principio de un imperio que ya se extiende a Europa y Estados Unidos.
Por ejemplo, Forrester Research estima que la audiencia hispana de internet llegará a 77 millones en el año 2007. Por lo menos 10% por ciento de eso que espera ya lo cubre T1msn, tan sólo en México es utilizado por ocho de cada diez personas que entran a internet.
La polémica sombra de Salinas de Gortari
Martínez señala en su libro que «la sombra que más ha asediado» a Slim «es la relación que mantuvo con el ex presidente Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), aunque su cercanía con el poder lo ha llevado a tener contactos con todos los presidente en las dos últimas décadas». De hecho, debió explicarse a fondo cuando, al frente de un consorcio en el que participaban Bell International Holding Co. y France Cable & Radio, ganó la joya de la corona, el monopolio Telmex, privatizado en una licitación organizada por Salinas de Gortari.
La oposición impugnó el resultado de aquella polémica subasta, y aunque se le acusó de ser un testaferro de Salinas, para quien se pidió juicio político, ningún juzgado objetó la validez de la venta. Fueron desestimadas las supuestas pruebas de opacidad o irregularidades. Slim siempre negó haber sido favorecido por el ex presidente e insistió en que sus competidores lo fueron en igualdad de condiciones. «¿Y para qué iba a ser prestanombres y manejarle su dinero a un político? No lo he hecho nunca, ni con mis hermanos, nunca», repetiría diez años después.
Slim hace frente a Alierta ( Telefónica)
El magnate mexicano ha ganado a Telefónica la pugna por la brasileña Embratel y disputa su liderazgo en otros mercados latinoamericanos . En telefonía fija, Telefónica domina el 24% del mercado regional latinoamericano, frente al 17% de las compañías Telemar y al 16% de Telmex
Hosco, habil negociador y asesorado por su amigo y ex presidente del Gobierno Felipe González, el magnate mexicano Carlos Slim pretende vencer a Telefónica, el grupo presidido por Cesar Alierta, en la carrera por Latinoamérica. El amo de Telmex y América Móvil, el mayor millonario de la región, que acaba de ceder el testigo de Telmex a su hijo Carlos, ha ganado una batalla a su competidora al arrebatarle la número uno de telefonía de larga distancia de Brasil, Embratel.
La guerra por la región está librándose y por eso Slim amplió su participación con la argentina Techtel y compró el 40% de Chilesat y la obtención de una licencia de telefonía móvil en Uruguay.
Slim pactó hace cuatro años con el Gobierno de México la congelación de tarifas de la telefonía fija ante la desaceleración económica de ese país. A partir de entonces, comenzó la aventura por el resto de la región de este descendiente de libaneses católicos, empresario de larga trayectoria, pero alguna vez acusado de ser testaferro del ex presidente mexicano Carlos Salinas de Gortari.
Ante la fuerte competencia que encontró fuera de su país, se dio cuenta de que necesitaba escala. En telefonía fija, Telefónica domina el 24% del mercado regional, frente al 17% de Telemar y al 16% de Telmex. En móviles, Telefónica alcanzará el 40% con la adquisición de la subsidiaria de BellSouth, mientras América Móvil cuenta con el 30% y Telecom Italia, con el 10%.
En 2003, Slim aceleró su expansión en móviles, al tiempo que se retiraban de la región multinacionales como Verizon o France Télécom. Compró las brasileñas BCP y BSE, la argentina CTI y la salvadoreña CTE. Este año se quedó con AT&T Latin America, con una importante red de fibra óptica en Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Perú que lo fortalece en telefonía fija y transmisión de datos. Slim es socio de Microsoft en el portal M1MSN. Telmex compró el 80% de Techtel, que atiende a clientes corporativos en Argentina y Uruguay.
Esta semana adquirió el 40% de Chilesat, la tercera compañía de Chile en larga distancia, también dedicada a la transmisión de datos, y en los próximos días presentará una oferta por el resto de las acciones.
Carlos Slim deja a su hijo al frente de la operadora TELMEX
El magnate mexicano Carlos Slim Helú, el empresario más rico de Latinoamérica, dejó el cargo de presidente del Consejo de Administración de Teléfonos de México (Telmex), que será ocupado por su hijo Carlos Slim Domit. La asamblea de accionistas de Telmex aprobó los cambios en el consejo de administración y nombró a Slim como presidente honorario vitalicio, según un comunicado de la compañía facilitado a las autoridades bursátiles mexicanas.
Los accionistas ratificaron en sus respectivos cargos a los demás integrantes del Consejo de Administración, entre quienes están Emilio Azcárraga, dueño de Televisa; Jaime Chico Pardo, director de Telmex; Ángel Losada, de la cadena Gigante; Fernando Senderos, del Grupo Desc, y Marco Antonio Slim Domit, otro de los hijos de Slim.