La esclavitud infantil es un problema moral y político, y sólo tiene solución desde estos dos terrenos: la moral y la política. Exigimos, por tanto, a sindicatos y partidos que denuncien y combatan las causas de la esclavitud infantil.
Defendamos el derecho de los niños a tener una escuela, una educación, una familia, que puedan jugar y ser personas.
Por eso exigimos a los poderes políticos y económicos la ABOLICIÓN INMEDIATA Y URGENTE de la esclavitud infantil.
¡Construyamos una opinión pública solidaria que haga posible la erradicación de la esclavitud infantil!