Sólo la natalidad de los extranjeros ha ayudado en los últimos años a producir un leve repunte, pero lejos todavía de los niveles mínimos de reemplazo generacional.
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España está sufriendo un desplome demográfico sin precedentes. «No sólo es el país de la UE que más rápidamente está envejeciendo, con un crecimiento del 75% desde 1981, sino que es el país donde el porcentaje poblacional juvenil ha decrecido más, con una reducción del 44% en su peso poblacional», asegura el Instituto de Política Familiar» (IPF).
El presidente del IPF, Eduardo Hertfelder, advierte de que «se necesitarían 105.000 nacimientos más al año para empezar a cambiar la tendencia de envejecimiento poblacional» y sólo «alcanzando los 560.000 nacimientos anuales se empezaría a invertir la tendencia actual».
Fuera del reemplazo generacional
Actualmente, «el número de nacimientos (481.102 en el año 2006, con una tasa de fecundidad de 1,37 hijos por mujer) está tan alejado del nivel de reemplazo generacional (2,1) que está provocando un desequilibrio demográfico en España sin precedentes», prosigue Hertfelder.
Los nacimientos en España no aseguran el reemplazo generacional
Los nacimientos se encuentran en un nivel muy bajo con una gran reducción en 26 años (1980-2006), pasando de 571.018 en 1980 a 481.102 nacimientos al año en el 2006 a pesar del aumento poblacional en este periodo.
Sólo la natalidad de los extranjeros ha ayudado en los últimos años a producir un leve repunte, pero lejos todavía de los niveles mínimos de reemplazo generacional.
La exigua tasa de fertilidad actual situada en 1,37 hijos por mujer no llega apenas a las 2/3 partes de la tasa de reposición necesaria.
La población juvenil española es la que más ha decrecido en los últimos 25 años
El descenso llega hasta el 44% (1981- 2006), pasando del 25,7% al 14,5% en 25 años y perdiendo más de 3,3 millones de jóvenes.
Así, ha pasado de ser la cuarta parte de la población en 1981 a sólo la séptima parte en 2006.
España es el país de la UE que más rápido envejece
Tiene el mayor incremento absoluto de mayores en los últimos 25 años, habiendo crecido en más de 3,1 millones de personas hasta alcanzar más de 7,4 millones de personas (un 75% de incremento). Ya representan la sexta parte de la población.
Desplome demográfico
El enorme cambio en la estructura poblacional respecto al existente hace sólo 25 años (en 1981 todavía había una pirámide, aunque ya deformada), refleja que frente a un aumento en la edad de vida, el desplome demográfico, donde los nacimientos han caído más aprisa que en ningún otro país europeo, está llevando a una situación insostenible.
Preocupante futuro si no cambia la tendencia
Esta tendencia también se refleja en la estructura social. Las proyecciones actuales reflejan que en el año 2050, si no se hace cambiar la tendencia, por cada 3 personas en activo 2 personas estarán jubiladas; mientras que en el resto de Europa por cada 2 personas en activo habrá 1 jubilada, es decir estaremos un 33% peor que en el resto de Europa.
El futuro: España, el tercer país más envejecido del mundo
Esta situación provocará que España sea el tercer país más envejecido del mundo en 2050. Una de cada tres personas será mayor de 65 años (34%).
