Hace casi 50 años, la determinación de una mujer negra de 42 años, que se negó a ceder su asiento a un pasajero blanco en un autobús de Montgomery (Alabama), dio un paso vital en la lucha por los derechos civiles de los negros en Estados Unidos. También representó el inicio de una protesta que promovió la figura de Martin Luther King. Esa mujer, convertida desde entonces en icono de la igualdad, era una modista pobre y militante llamada Rosa Parks.