Los catalanes, como el resto de los españoles, tienen como primera y gran preocupación el paro y en segundo lugar la economía, y si hacemos caso a la encuesta de la Generalitat, aún les preocupan más los políticos que la financiación autonómica o las relaciones entre Cataluña y España.
Y sin embargo, Artur Mas presenta estas elecciones como un plebiscito sobre su persona y la independencia catalana. Todo una falacia.
Las encuestas oficiales sobre la intención de voto y el barómetro político en Cataluña del Gobierno central (el CIS) y el de la Generalitat (el CEO) se hicieron públicas hace 4 días con apenas media hora de diferencia. Y en sus ‘tripas’ se demuestra que los políticos confirman que son un problema para los españoles, porque pese a que las preocupaciones de los ciudadanos van por un lado, las de los partidos van por otro y nada hace que recapaciten.
A la pregunta de cuál es la principal preocupación de los catalanes, en la encuesta de la Generalitat el paro ocupa el primer lugar (41,6%), seguido de la economía (23), de los políticos (9,8) y sólo en cuarto lugar aparece la financiación de Cataluña (7,7) y la relación entre Cataluña y España (7,6). Los resultados son prácticamente idénticos a la encuesta del CIS: paro (59,3%), economía (11,4), financiación (7,9), sanidad (5,7) y autogobierno (5,6). Pese a estos resultados, la campaña gira únicamente en torno al soberanismo.
La sociedad catalana, según el CIS, se encuentra prácticamente dividida en cuanto a su sentimiento de pertenencia a España o a Cataluña. Un 48,4% de los catalanes se siente únicamente español, más español que catalán o tan español como catalán. Por el contra, un 49,2% se siente más catalán que español o únicamente catalán. Las cifras varían en la encuesta de la Generalitat: un 39,5 % frente a un 58,3. Y en la encuesta ‘española’, un 55,8% contesta categóricamente que no se considera un nacionalista catalán.
Las dos encuestas preguntan por la fórmula alternativa para la organización de España. En la del CIS, el 29,4% de los catalanes cree que España debería ser un Estado central sin autonomías, que tuvieran menos competencias que en la actualidad o no tener más que ahora. Para el 41,4%, sin embargo, España debería ser un Estado que reconociese la posibilidad de que las autonomías se convirtieran en Estados independientes. Las cifras en las del CEO son similares: un 23,1 frente a un 44,3%.
Sin embargo, el CIS también preguntaba–en su barómetro general- al resto de españoles. Y aquí los porcentajes son inequívocos: un 22,5% cree que las autonomías no deben existir; un 43,9% piensa que deben tener menos poder o quedarse como están; un 11,6% piensa que deberían tener más competencias y sólo un 10,2% aprobaría que las CC.AA. pudieran convertirse en Estados independientes.
Autor: A P G ( * Extracto)
Fuente: ElConfidencial.com