Indigenas de Honduras se crucifican en protesta contra el sometimiento del Gobierno al imperialismo financiero

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Así está el pueblo por ceder a las presiones de los organismos internacionales. Doce indígenas se crucificaron el 22 de agosto de 2003 para protestar contra las medidas adoptadas por el gobierno en contra del pueblo para complacer a los organismos de crédito internacional. En sus cruces, los indígenas lencas colocaron rótulos con los nombres de cada organismo internacional y en una manta señalaban que el pueblo no aguanta más tanta crucifixión.

Fuente: Diario Tiempo
22 de agosto de 2003

TEGUCIGALPA. Doce indígenas se crucificaron el pasado 22 de agosto de 2003 para protestar contra las medidas adoptadas por el gobierno en contra del pueblo para complacer a los organismos de crédito internacional. En sus cruces, los indígenas lencas colocaron rótulos con los nombres de cada organismo internacional y en una manta señalaban que el pueblo no aguanta más tanta crucifixión.

El coordinador Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH), Salvador Zúñiga, manifestó que son algunas de las acciones de protesta de los campesinos lencas que llegaron a la capital a reclamar al gobierno por las leyes nocivas al pueblo que pretenden aprobar y otras que ya aprobaron entre ellas la Ley de Tierras, Ley de Agua, Ley de Servicio Civil y deforestación de los bosques que afectan al pueblo.

Entre el grupo de indígenas que se encuentran en la capital está Moisés Espinoza (19), sobrino de Leonardo y Marcelino Miranda, quienes se encuentran presos desde hace varios meses por defender su tierra.

Espinoza expresó que para sus familiares el tener a sus tíos encarcelados ha significado dolor, especialmente por la persecución de su familia de parte de los terratenientes cafetaleros de Montaña Verde.

A pesar de su analfabetismo el joven campesino dijo que salió por primera vez de su pueblo para defender la tierra que desde muy pequeño trabaja él y su familia. «Mis tíos están presos por defender la tierra y debo ayudarlos», expresó.

Un poco tímido, el campesino dijo que otro de sus motivos para viajar a la capital es porque quería conocer «la gran ciudad», ya que nunca había salido de su pueblo.

La vida en Montaña Verde es trabajar, comer y dormir ya que no hay luz eléctrica y el agua es a través de vertientes o nacientes de agua, la que es abundante en el sector y por la que los cafetaleros quieren sacarnos , manifestó.


Comunidad indígena en Honduras hizo esta protesta de crucificarse.
11/06/2003

El agricultor indígena Medardo Gonzalez, de 33 años, de Las Palmas, en Honduras, se crucificó simbólicamente. Es observado por una niña durante el acto de protesta noviolento en frente de la Casa Presidencial.

Exigía mejores condiciones de vida para la comunidad.