'¿Usted personalmente qué cree, que el embrión y el feto son o no son persona?', esta fué una de las muchas preguntas a las que el Sr Presidente no quiso contestar.
Era una pregunta directa, de sí o no, sencilla, que además iba a la raíz de muchos problemas.
Nada más escucharla vino a mi memoria Martin Luther King y los millones de negros americanos que se manifestaron en Estados Unidos con aquel cartel revolucionario: «I am a man – Yo soy un hombre». Un cartel directo a la conciencia, que cambió la sociedad y la legislación americana: «Soy negro. Soy persona. Tengo dignidad.»
Ese grito debe seguir escuchándose hoy: «Soy congoleño, valgo más que todos los minerales por los que se nos mata. Soy persona». «Vengo en patera. Mi vida está por encima de mis papeles. Soy persona». «Tengo 12 años y soy esclava sexual de los turistas occidentales. Sé que soy persona».
Soy un hombre, una mujer, un niño por nacer… ¡Soy persona!
Señor Zapatero, atrévase a romper con los pactos de silencio, con los discursos políticamente correctos y las respuestas de diseño. No tenga miedo y escuche el sincero grito de los débiles que desafía a nuestro sistema social, político y económico, a mirarles como lo que verdaderamente son: PERSONAS.
Noelia Santiago,
Militante del Partido SAIn. España