En el Día Mundial del Refugiado recordamos a todas las personas que se han visto obligadas a marcharse de su país por la guerra, por la violencia o por el hambre. Los campos de refugiados e inmigrantes son auténticos campos de concentración donde la vida humana no vale nada. Se estima que ya han desaparecido más de 10.000 niños provenientes de la guerra, 5.000 de ellos solo en Italia en manos de las redes mafiosas.