Un paso más en defensa de la libertad y la solidaridad

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‘El Ayuntamiento de Alcalá de Henares ha convertido nuestra ciudad en patrimonio del totalitarismo y de la insolidaridad’

El Ayuntamiento de Alcalá, gobernado por el Partido Popular, está multando sistemáticamente al Partido SAIn  y al MCC por pegar carteles con celo anunciando sus actos solidarios, sin embargo el propio ayuntamiento, como todo el mundo sabe, anuncia sus actividades de la misma forma.


Tanto el Alcalde, Bartolomé González, como los concejales Jesús Domínguez y Bernáldez, han demostrado talante caciquil al comunicar por escrito, en enero, que no tenían ninguna intención de reunirse a dialogar, ni  pretendían rectificar ni una coma de las ordenanzas. Esta actitud de los responsables del Partido Popular  es la que finalmente había colmado el vaso de las injusticias y fue la que ha obligado a que tanto el MCC como el Partido SAIn pongan en marcha esta campaña en defensa de la libertad de expresión y la solidaridad.


El pasado 7 de marzo se celebraron en Alcalá de Henares las II Jornadas en Defensa de la Libertad de expresión y de la Solidaridad que el Partido SAIn y el Movimiento Cultural Cristiano están realizando desde el pasado 14 de febrero. Tanto el MCC como el Partido SAIN llevan años luchando contra las causas del hambre, el paro y la esclavitud infantil.


Los actos celebrados el sábado 7, están dentro de una campaña permanente que ambas organizaciones están realizando para conseguir una modificación de las ordenanzas municipales, que atentan gravemente contra la libertad de expresión.


Las II Jornadas comenzaron con un despliegue informativo en el que se pretende concienciar a la población sobre los peligros que suponen ciertas reglamentaciones municipales que con la excusa estética o medio ambiental sirven para controlar y limitar la libertad del pueblo. Se estuvo recordando lo que ha supuesto en España la falta de libertad de expresión durante 40 años de franquismo y lo que supone  actualmente que  haya regiones españolas donde el nacionalismo está impidiendo la vida en libertad de cientos de miles de ciudadanos.


Por la tarde se desarrollaron los actos principales de las jornadas. Sobre las 19 h, en la zona central de la calle Mayor se levantó, simbólicamente, un muro que representaba el Totalitarismo que el ayuntamiento complutense quiere imponer a la sociedad. El muro estaba formado por 5 bloques. El inferior representaba a la libertad de expresión que está siendo pisoteada y aplastada. El segundo bloque representaba las ordenanzas municipales anticonstitucionales que se nos quieren imponer; el tercer bloque representaba  los 4.000 euros de multas  que el ayuntamiento ha impuesto a las diferentes organizaciones sociales que como el MCC y el SAIn llevan años luchando por la solidaridad. El cuarto bloque simbolizaba la falta de dialogo y la soberbia de la corporación  municipal incapaz de rectificar lo que es manifiestamente una injusticia. El quinto bloque del muro era el Totalitarismo, como forma de gobernar.


Junto a muro había dos lemas. Uno de Gandhi:» la ley de la mayoría no tiene nada que decir cuando le toca hablar a la conciencia».  Con este texto se pretendía poner de manifiesto que toda ley esta sometida a los principios morales que hacen respetar los derechos humanos. La democracia, se recordó, es un procedimiento que debe estar sometido a aquellos principios que salvaguardan la dignidad humana. El otro lema era de Martin Luther King y decía » más que las acciones violentas de los malos, temo el silencio de los buenos». Con este lema se quería transmitir que todos los ciudadanos somos responsables políticos de que los derechos humanos se respeten; el silencio y la pasividad del pueblo es una arma con la que los poderosos siempre cuentan para ir minando los derechos políticos y sociales.


En la representación simbólica que se desarrolló en la calle Mayor también hubo dos personas que estaban tumbadas en suelo a lado de los lemas, amordazadas y atadas. Estas figuras escénicas representaban al propio pueblo de Alcalá de Henares, cada día más amordazado por ordenanzas y leyes injustas que coartan su libertad de expresión.


Sobre las 20 h comenzó el acto central  donde se comunicó a la ciudadanía el significado del acto y de la campaña que se está llevando a cabo. El portavoz conjunto de la campaña explicó que mientras se acababan de cumplir el 60 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y  el 30 de la Constitución, en Alcalá de Henares se estaba persiguiendo la libertad de expresión y  la solidaridad  con los más empobrecidos. También señaló que todas las instituciones políticas y las leyes deben estar al servicio del pueblo y no al revés; que se deben respetar los principios  morales que sostienen la dignidad de la persona, tanto en  sus deberes como en sus derechos. El portavoz recalcó que si el ayuntamiento  complutense no respetaba la justicia y la moral  gobernaba como una banda de caciques.


Se informó a los asistentes que el MCC lleva casi 30 años luchando contra las causas del hambre, el paro y la esclavitud infantil y difundiendo una cultura solidaria; que el Partido SAIn había nacido recientemente para llevar la lucha por la justicia y la solidaridad con los empobrecidos al terreno político. » Ninguna de las dos organizaciones ha pedido ni tiene un solo euro de subvención porque quieren ser libres y responsables», recalcó el portavoz, que añadió » nuestro compromiso moral con la justicia, avalado por tantos años de sacrificios, no puede estar sometido a la arbitrariedad de una corporación ciega a la solidaridad y a la libertad».


El portavoz terminó el acto afirmando que la defensa de la solidaridad y de la libertad de expresión exigen un compromiso permanente. No es opcional que ni una ni otra sean mermadas, por ello la campaña seguirá mientras el ayuntamiento complutense no rectifique.. Para finalizar el acto  se derribó el muro simbólico del totalitarismo y se animó a los asistentes a seguir apoyando los actos por la libertad de expresión.     


«Alcalá de Henares es patrimonio de la humanidad, pero este Ayuntamiento la está convirtiendo en patrimonio del caciquismo»