El próximo 1 de octubre de 2004 entrará en vigor la reforma del artículo 270 del Código Penal que castiga a quien posea software capaz de eliminar los sistemas de protección de los CD´s y DVD´s, según recoge el web de la Asociación de Internautas.
La Asociación Música en Internet (AMI) denuncia que esta medida impedirá que el consumidor ejerza su derecho a tener una copia privada de la música descargada de sitios legales de Internet.
Así, a partir de esta fecha, cualquier persona que disponga de un software que tenga la capacidad de eliminar los sistemas de protección de los CD o DVD comprados en un establecimiento legal, estará incumpliendo la ley, según el nuevo texto de la reforma. La AMI señala que, en la actualidad, prácticamente todos los CD y DVD que salen al mercado incorporan este tipo de protecciones, por lo que si un usuario desea realizar una copia de estos CDs para el coche o simplemente para tener otra copia de seguridad, a lo cual tiene derecho legal (art. 25 de la Ley de Propiedad Intelectual), la única forma de hacerlo es disponer de un software capaz de desproteger el sistema anticopia. Ahora el hecho de poseer de este aparato puede suponer penas de cárcel.
Para la AMI esta reforma supone un «fraude» para el consumidor ya que éste ya está pagando una cantidad «dirigida a compensar los derechos de propiedad intelectual que se dejaran de percibir por razón de la expresada reproducción».
Denuncias contra el canon
Esta denuncia se une a las continuas manifestaciones de protesta de la AMI en contra del canon por copia privada que deben abonar los consumidores al adquirir los CD Regrabables. Según esta organización, el abuso se produce al existir un doble pago por un solo concepto, ya que al canon que se paga en el CD virgen, hay que sumar el de las cantidades que los servicios on line de descargas cobran en los ficheros que son aptos para su grabación a CD.
El precio de los servicios de descarga de música en Internet respaldados por la industria discográfica varía en función de la posibilidad de exportar los ficheros musicales fuera del ordenador del usuario. Así, los que pueden ser grabados en un CD, son bastante más caros ya que incluyen el canon por grabación. Mientras, las canciones limitadas a su reproducción sólo en el ordenador son bastante más baratas.
El Pais
10 septiembre de 2004