Cacería en Tenerife

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Redada policial contra 'sin papeles' en un comedor de beneficencia. ‘Detuvieron a 15 irregulares en un centro de las Hermanas de la Caridad’

Desde el Ministerio del Interior se ha negado por activa y por pasiva que existan órdenes de ir a la caza del inmigrante sin papeles. Se ha asegurado que de ninguna manera se han impuesto cupos del número de detenidos por estancia irregular que debe practicar cada una de las jefaturas de Policía. No, no y no ha sido siempre la respuesta.


Pero los episodios que ponen en duda esta versión oficial no acaban, son ya incontables. EL MUNDO denunció hace meses que en Madrid se habían impuesto cupos de mínimos mensuales de detenciones de inmigrantes que están irregularmente en España.


Ahora, el último episodio se ha producido en Tenerife. Y, quizá, ha sido uno de los más duros. Y es que efectivos de la Policía Nacional realizaron un dispositivo especial de «caza y captura» en un comedor de beneficencia de la isla canaria.


Los hechos se produjeron a finales del pasado mes de junio. A la hora de comer, la Policía desplazó varias furgonetas (antiguas lecheras) al comedor social 'La Milagrosa', gestionado por las Hermanas de la Caridad. Inmediatamente se montó un dispositivo en la puerta de acceso al comedor. En su interior había alrededor de unas 80 personas comiendo.


Los efectivos de Tenerife controlaron la salida del centro de todos los comensales y les pidieron la documentación. Iban a tiro hecho. Sospechaban que a ese comedor social acudía cerca de una veintena de inmigrantes sin permiso para estar en España, y fueron a por ellos.


Al final fueron 15 los inmigrantes en situación irregular que fueron detenidos ese día en el comedor social. Pero la actuación de los operativos no se quedó en el control de la salida del comedor. Varios agentes también accedieron al interior. Habían elaborado información previa (como si fuera una actuación antiterrorista) y sabían que las monjas que gestionan el comedor social contaban con la colaboración en la cocina de un inmigrante. Sospechaban que era otro sin papeles. Accedieron a la cocina, localizaron al sospechoso y se lo llevaron. Efectivamente, también estaba de forma irregular en España. Los detenidos fueron trasladados a las dependencias de extranjería donde se iniciaron los trámites de expulsión correspondientes. Pero la gran mayoría de ellos apenas permaneció unas horas en las oficinas de la Policía. Quedaron en libertad y siguen acudiendo a los comedores gestionados por las Hermanas de la Caridad para poder comer.


«Nosotros no preguntamos si están legales, ilegales o de ninguna de las maneras. Nosotros ayudamos a los que no tienen qué comer», comentaba a este periódico una de las responsables del comedor social, que recordó que a los pocos días de producirse esta redada acudió a 'La Milagrosa' un mando policial. Según explicó a EL MUNDO, pidió disculpas por la actuación de la Policía que se produjo en junio y se comprometió a que no se volverá a repetir.


Según explicaron fuentes del Ministerio del Interior, se ha solicitado un informe interno sobre esta redada. Ese informe ha sido enviado ya a la Secretaría de Estado, desde la Jefatura Superior de Policía de Canarias. De momento, la operación de cacería de Tenerife no ha tenido consecuencias internas.


EL MUNDO adelantó que desde el Ministerio del Interior se había ordenado hace meses que había que aumentar la presión contra la inmigración ilegal. Desde Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba ha negado siempre que hubiera una cacería hacia los sin papeles.


LA POSTURA DE LA IGLESIA


«Fui extranjero y me acogisteis»


El responsable de Migraciones en la Conferencia Episcopal, José Sánchez, advirtió de que en España y en Europa «se ha llegado a plantear la posibilidad de penar» como delito «la hospitalidad» de quienes «acogieran y mantuvieran a emigrantes 'sin papeles'». En su carta semanal a sus diocesanos, el obispo de Sigüenza-Guadalajara recuerda que Jesús puso la acogida del extranjero como una seña de identidad de sus discípulos y una causa determinante de salvación, cuando dijo: «Fui extranjero y me acogisteis». Sánchez instó a los fieles a aprovechar las vacaciones veraniegas para ejercer «la virtud» de la hospitalidad, en especial con los inmigrantes.


Fuente: El Mundo