Os queremos transmitir nuestra enorme alegría de poder celebrar el CURSO-ENCUENTRO, en el Aula Malagón-Rovirosa: EL COMPROMISO POR EL BIEN COMÚN FRENTE A LA GLOBALIZACIÓN DE LA INDIFERENCIA. (7 al 11 Agosto)
¡Qué importante es celebrar estos cursos! No nos cabe duda que el hecho de reunirnos y celebrar juntos este encuentro puede constituir un acto revolucionario, pues puede transformar nuestras vidas. Hoy que se exalta lo individual al máximo, hemos decidido juntos y libremente, formar nuestra conciencia para poder cambiar todo lo que esté en nuestras manos.
Uno de los misterios que componen la existencia de los seres humanos, es que la vida cobra sentido y plenitud en la medida que la donamos sinceramente a los demás. Trabajar por el bien, por la justicia, por la verdad es la vocación esencial del ser humano. Y esto es lo que nos hace alcanzar la felicidad personal y social.
Queremos ser esa «gente fastidiosa» que se rebela contra lo injusto y las leyes que degradan la dignidad de millones de seres humanos en el mundo. Unos cuantos que tienen el poder y lo ejercen a través de sus instituciones y fundaciones (que no son muchos) han decidido cómo se tiene que organizar el mundo desde el más puro materialismo, utilitarismo o el disfrute hedonista.
El mal hace mucho ruido, pero sabemos que el BIEN vencerá en el mundo. Para ello tenemos que ponernos manos a la obra y dar los primeros pasos para trabajar por el bien común y romper con el totalitarismo de la indiferencia.
Tenemos que unirnos para crear una cultura del bien común y de la vida. Trabajar por el bien común contribuye a favorecer el desarrollo integral -material y espiritual- de cada ser humano sin excepción de nadie y al mismo tiempo permite el desarrollo de la sociedad como una comunidad, es decir, un espacio donde la vinculación fundamental es la solidaridad, la amistad social, la cooperación…donde la referencia permanente serán los más necesitados, los empobrecidos, los más débiles, los enfermos y desde ellos y solo desde ellos es posible alcanzar el bien de todos y cada uno de los miembros de la sociedad.
No hay nada tan maravilloso como que un grupo de amigos -jóvenes y mayores- queramos compartir los ideales, los bienes, el trabajo para el bien común… cogiendo fuerza y valentía para implicarse en un compromiso permanente y apostar por una sociedad que vaya construyéndose desde “el poder de los sin poder”.
La razón de este curso encuentro es promover esta entrega sincera y experimentar que es posible construir un mundo donde sea más fácil ser bueno. En definitiva, la razón de este encuentro es promover la militancia por la solidaridad entendida esta no como un sentimiento subjetivo, sino la decisión firme y perseverante en trabajar por el bien común.
En palabras de D. Tomás Malagón:
Militante es todo aquel que desinteresadamente lucha y se afana por instaurar en la sociedad un ideal, por llevar adelante una empresa determinada, por difundir un modo de ser y actuar, que él considera mejor, entre los hombres y mujeres.
Y por supuesto que no todos van a ser militantes. Sólo algunos se esfuerzan y trabajan por cosas que nada tienen que ver con su medro, con su ganancia, con su comodidad. Pero ¡qué bueno sería que todos en la sociedad fuéramos militantes! Militantes enamorados de este o aquel ideal, por considerarlo bueno: pero militantes. Lo malo es el aborregamiento, el adocenamiento, el aburguesamiento, comodón o cobarde, tan general. Esto nos da náuseas. Y de alguna manera quisiéramos contribuir a hacer aumentar el número de los que creen en algo, de los que se esfuerzan por algo, de los que se consagran su vida a algo que no sea su dinero, su carne o su vanidad.
¡Estamos llamados a transformar el mundo! Queremos promocionar una cultura de vida para construir BIEN COMÚN.
Estáis invitados y os esperamos, todavía puedes apuntarte al curso-encuentro.
INSCRIPCIÓN