En las maquilas de México, como en la mayoría del mundo, son prohibidos los sindicatos. Es habitual la explotación de los trabajadores, quitándoles los mínimos derechos laborales, llegando incluso al asesinato. ¿Qué están haciendo nuestros sindicatos? Sin militancia y sin vida solidaria están condenados a traicionar a los más débiles.