Ese día fallece «la niña». Belén María Sánchez Ojeda nació el 20 de julio de 1964. Era la mayor y única chica entre cuatro hermanos. Una joven de 16 años.
En el puerto hay
conflicto. Los portuarios luchan por sus derechos. El piberío se solidariza
con sus padres que están en la rotonda. La guardia civil vigila la entrada y la
salida. Un conductor pierde el control y la atropella. ¿Accidente sin más?
¿Asesinato? Más bien que siempre pagan los pobres…
El sepelio de Belén
María constituyó una de las mayores manifestaciones de dolor que se recuerdan en
la capital grancanaria. Unas 30.000 personas marcharon acompañando los restos de
«la niña» en el más absoluto silencio durante más de 8 kilómetros hasta el
cementerio de San Lázaro donde fue enterrada.
Nos queda su
esperanza… Su vida solidaria… Su juventud truncada… Debe ser un
«icono» para los jóvenes del mundo esta joven de Las Palmas de Gran Canaria.
Amigo lector, te dejamos con uno de sus escritos, porque -para quien lucha-
alimentan la esperanza…
Si el mundo fuera más
limpiosi el hombre aprendiera a
amarsi el hombre supiera
darsenada estaría mal,
no habría tantas guerras
y brillaría la paz.
Si el hombre fuera otro
hombresi el hombre supiera
amarsabrías en su mirada
las verdades descifrar,
en el brillo de sus
ojoshabría sinceridad.
Las palabras de sus
labioshablarían la verdad.
Todos juntos de las
manosel camino caminar.
Qué lastima, Señor mío,
que el hombre no sepa
Amar.
