Pepsi Vs Coca-Cola recorre la historia de estas marcas en el contexto de la política global. La segunda guerra mundial fue el vehículo perfecto para la distribución de Coca-Cola (incluyendo a los nazis), plantas en primera línea pagadas por el departamento de guerra de EE.UU. Nixon consiguió que Khrushchev bebiera una Pepsi convirtiéndose en el primer producto de EEUU hecho en la Unión Soviética. En 1949, Mao sacó Coca-Cola fuera de China. El presidente Carter hizo que volviera en 1978. Se trata de una reflexión sobre los vínculos entre el poder político y el corporativo. En Chile, el jefe de Pepsi Cola publicó un diario que fue utilizado por la CIA para ayudar al sangriento golpe de estado de Pinochet.