Aparte de lo insultante que consideré su tono y la forma de tratarme (al ofrecerle una revista Autogestión), lo que me quedó claro fue que Vd. desconoce la actividad y planteamientos de mi asociación, así como experiencias históricas similares que han pretendido lo mismo: la solidaridad con los empobrecidos promoviendo una cultura autogestionaria. Por eso me decido a escribirle. Lo hago en carta abierta por el interés que el tema tiene para la comunidad universitaria y por el deber que tengo de defender la dignidad de los medios pobres que utilizamos, la dignidad de nuestra Editorial…CARTA ABIERTA A TITO A. VARELA, CATEDRÁTICO DE BIOLOGÍA.
Noviembre 2003
He dejado pasar algún tiempo tras una tensa conversación en su Facultad, durante las Jornadas Universitarias que mi asociación llevó a cabo entre el 28 y el 30 de Octubre. Aparte de lo insultante que consideré su tono y la forma de tratarme (al ofrecerle una revista Autogestión), lo que me quedó claro fue que Vd. desconoce la actividad y planteamientos de mi asociación, así como experiencias históricas similares que han pretendido lo mismo: la solidaridad con los empobrecidos promoviendo una cultura autogestionaria. Por eso me decido a escribirle. Lo hago en carta abierta por el interés que el tema tiene para la comunidad universitaria y por el deber que tengo de defender la dignidad de los medios pobres que utilizamos, la dignidad de nuestra Editorial. También porque considero ineludible que los sufrimientos de los empobrecidos y sus causas estén en la Universidad, por el bien de aquellos y de esta. Me siento responsable de que se desconozcan estas iniciativas, y renuevo mi empeño en el trabajo asociado.
En primer lugar, afirmo que se equivoca cuando nos compara con «los mercaderes del templo». Estos hacían negocio (enriqueciéndose) en la Casa del Señor. La Editorial Voz de los Sin Voz se empobrece, poniendo su trabajo al servicio de todos sin obtener beneficio, también en la Universidad (que, por desgracia, se parece poco a la Casa del Señor). Espero que usted haya reaccionado con la misma rabia y desprecio ante cada uno de los lucrativos negocios que llenan sus arcas en la USC (fotocopiadoras, bares, máquinas expendedoras de tabaco, bebida, comida, sucursales bancarias…) que ante nuestro puesto de publicaciones solidarias. Tal vez le suene raro, pero hace 50 años era muy habitual que las asociaciones obreras (por ejemplo) tuvieran sus propios medios de información, que sostenían con trabajo militante. Es decir, con el sudor y fatiga de horas al salir de la fábrica, arrancadas al descanso y a la familia. Le respondo ahora a su pregunta «¿y vosotros no trabajáis?». Trabajamos para vivir, y trabajamos también sin cobrar para construir realidades solidarias como esos libros que tanto le han molestado.
Así sostenemos la revista Autogestión y la Editorial. Voz de los Sin Voz merece un respeto por ser de las editoriales más prolíficas de España, y la única que funciona con trabajo gratuito, sin publicidad y sin subvenciones para servir a la difusión de una cultura transformadora, para luchar contra las causas del Hambre, del Paro, de la Esclavitud Infantil, que tienen solución, si queremos. Por desgracia, hoy el negocio editorial y la prensa escrita distan mucho de servir a nada más que los bolsillos de sus amos, y a la difusión de la cultura que interesa a quien los paga (mediante publicidad y subvención). No están al servicio de los hambrientos, es evidente.
En segundo lugar nos reprocha que «hacemos política en la USC, y no es el sitio». Como bien sabe, todos los partidos políticos tienen sus asociaciones estudiantiles para tal fin. Esa política pequeña, ese politiqueo no es el que hacemos. Pero sí POLÍTICA con mayúsculas. Política es defender los intereses de los inmigrantes que llegan a mi país en patera, los intereses de los niños esclavos que fabrican los juguetes de mis hijos, los intereses del 80% de la Humanidad hambrienta. Es en la política donde los problemas de los hermanos tienen solución. Usted hablaba de investigación, ¿no es política investigar lo que pagan las multinacionales y no lo que necesita la mayoría de los seres humanos?, ¿no es política lo que distribuye la Gaceta Universitaria (y también publicidad, por cierto)? Si la Universidad es un foro de diálogo, si la ciencia ha de servir a la sociedad, hemos de plantearnos cómo servirla mejor. Eso tratamos de hacer. Como universitaria y como ciudadana tengo el deber de hacer esta «política». Y me temo que usted también.
Por último, quisiera ofrecerle la posibilidad de conocer más a fondo nuestras plataformas culturales, nuestra acción y nuestro trabajo, invitándole a un diálogo no-violento, en el que pueda dar también su opinión.
Pilar Gómez-Ulla Astray (Militante del Movimiento Cultural Cristiano)
Casa de Cultura y Solidaridad. Costa do Veedor, 37, bajo. 15703. Santiago. Tel: 617806563.
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