No hay vida solidaria sin oración.
Este año el Aula Malagón-Rovirosa comienza con los Ejercicios Espirituales, como momento privilegiado de revisión personal, de oración y de unión con Dios y con los hermanos.
Plantearse la vida solidaria, desde la vida consagrada o desde de la vida laical y familiar, supone orientar nuestras mentes y corazones de forma constante, a lo que el Señor nos pide.
La militancia cristiana necesita permanencia en la oración, permanencia en la contemplación, como esqueleto que sostiene la vida militante; facilitando los discernimientos que nos plantea nuestro trabajo en un mundo como el de hoy, en relación a los hermanos.
Los Ejercicios se están realizando en un ambiente de silencio, de trabajo personal, de celebración de los sacramentos; viviendo el tiempo a la medida y el ritmo, de la liturgia de las horas.
Con los Ejercicios comienza a caminar el XXXIV Aula Malagón-Rovirosa, esperando a los campamentos juveniles y el curso Norte-Sur a la vuelta de la esquina.
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